Cádiz

La Virgen de las Penas ya está coronada

El obispo Rafael Zornoza ha ceñido la presea a la Reina viñera en el pontifical en Catedral

La Virgen de la Palma, ya coronada Francis Jiménez

A. M.

Cádiz

A las doce del mediodía, a la hora del Ángelus, el obispo de Cádiz, Rafael Zornoza Boy coronaba este domingo, víspera de la Asunción, a la Virgen de las Penas de la archicofradía de la Palma en un Solemne Pontifical que se celebraba en la Catedral ante la presencia de numerosos vecinos, fieles, devotos y autoridades religiosas, civiles y militares, además de representantes de todas las hermandades gaditanas que en esta jornada histórica quisieron acompañar a la hermandad viñera.

La actividad comenzó temprano en el primer templo de la diócesis donde fueron llegando los más de ochocientos invitados que presenciaron esta coronación canónica, la primera de una imagen de penitencia desde 2011, cuando fue coronada la Virgen de los Dolores de Servitas y la segunda para el prelado gaditano que ya coronó la imagen de San José.

A la hora prevista, tras la monición de entrada, leída por Ángel Monge, comenzaba el Solemne Pontifical de Coronación de la Virgen de Las Penas en una Catedral llena en la que se cumplía el sueño de un barrio y de una hermandad que ha puesto todo su empeño en que esta devoción llegue a todo Cádiz.

Entre los asistentes en esta jornada de mantillas, chaqués y abanicos en la Seo estuvieron la delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía en Cádiz, Mercedes Colombo, el alcalde, reconocido devoto de La Palma, José María González, y miembros de la corporación municipal como Juancho Ortiz (PP), Lucrecia Valverde (Ciudadanos), Óscar Torres (PSOE) o Domingo Villero. También asistieron el subdelegado de Defensa en Cádiz, Ángel Javier Umbría, el general jefe de la IV zona de Guardia Civil de Cádiz, Alfonso Rodríguez, así como José Manuel Menacho, jefe provincial de operaciones de la Policía Nacional y el inspector jefe Ignacio Vega, jefe provincial de la UDYCO. La presidenta de la Autoridad Portuaria, Teófila Martínez, y el presidente de la Audiencia Provincial, Manuel Estrella, tampoco faltaron a este momento histórico en el que por supuesto estuvieron los miembros del Consejo Local de Cofradías de Cádiz, con el vicepresidente, Francisco Muriel, al frente, y representantes de todas las hermandades de la ciudad, así como de la provincia, con la Oliva de Vejer, el Carmen de Barbate, Los Santos de Alcalá o la Borriquita de Jerez.

Ceremonia excepcional

Entró primero en procesión la junta de gobierno de archicofradía de la Palma con la espléndida corona de oro, plata y piedras preciosas ejecutada por el orfebre cordobés Manuel Valera y que iba portada en parihuela por los padrinos de esta coronación, los padres paules y las Hijas de la Caridad.

Después accedieron los sacerdotes y presbíteros, además del deán de la Catedral, Ricardo Jiménez, quienes acompañaron al obispo, Rafael Zornoza en esta celebración.

Fue el padre Juan Enrique Sánchez, párroco de La Palma, quien procedió en primer lugar a exponer la historia de la Virgen de las Penas, recordando que desde 2006 se empezó a solicitar esta coronación y que fue en 2017 cuando el obispo propuso a la parroquia realizar unas misiones. En 2019, con la ayuda de los padres paules y las Hijas de la Caridad se iniciaron esas misiones y el 16 de noviembre de aquel año fue cuando se abrió el expediente de la coronación canónica. Justo ahora, tras dos años de pandemia, se ha cumplido esta realidad, este sueño. «La Virgen de las Penas ya es la primera de las viñeras y la Reina de nuestros corazones», afirmaba Juan Enrique.

A continuación fue el hermano mayor de La Palma, Francisco Javier Lucero, quien leyó el decreto de la Coronación en una ceremonia que musicalmente fue espléndida, brillante, con la participación del Coro Virelay y la Orquesta Barroca de Cádiz que interpretaron la Misa de Mozart. Y emocionante por supuesto fue también la intervención del coro de José Manuel Pedrosa que hasta en dos ocasiones entonó el himno de la coronación compuesto por Luis Manuel Real Guerrero.

Manuel Rodríguez, antiguo hermano mayor de la archicofradía de la Palma fue quien leyó la primera lectura y el salmo en este domingo en el que los viñeros también recordaron a dos pilares fundamentales como han sido José Luis Ruiz Nieto-Guerrero y Ángel Gutiérrez de la Mora. Y en la mente de todos también estaba ayer la que fuera hermana de la corporación, la inolvidable Chari Valero.

Palma Rendón, miembro de la junta de Gobierno y pregonera de la Juventud fue quien leyó la segunda lectura. Tras ello vino el Evangelio y la homilía del obispo.

Venerada en todo Cádiz

En ella, Rafael Zornoza destacó especialmente el fervor que existe en torno a la Virgen de las Penas y que él mismo ha podido comprobar en todo este tiempo previa a la coronación canónica. «Si la Viña y los viñeros estuviesen alejados de Dios este esfuerzo no tendría sentido pero la Virgen se alegra por este amor que le expresamos».

El prelado gaditano quiso igualmente apuntar que «la íntima relación entre la corona y la vida de fe de los fieles exige en nosotros una profunda conversión. María es invocada como Reina y la coronamos como Señora de todos nosotros, de sus hijos que la quieren y veneran en la Viña y en todo Cádiz. No olvidéis nunca que la verdadera corona de la Virgen sois vosotros mismos y el adorno y la joyas que pueden adornarla son los frutos de la fe en la caridad».

Lágrimas de emoción

Terminaba la homilía y se procedía al rito de la coronación, al momento más esperado y emocionante para todos los asistentes. Los padres paules y las Hijas de la Caridad llevaban al obispo la corona para que este la ciñera sobre la sien de la Dolorosa. La presea, espléndida, única, cargada de detalles gaditanos, y con más de cuatro kilos de peso, llegaba ante Zornoza en la pequeña parihuela para portarla. Era entonces cuando el prelado la bendecía y posteriormente accedía a la parte trasera del presbiterio de la Catedral para colocar la corona. El silencio fue máximo en ese instante en el que los corazones estaban puestos en Ella. Una vez coronada, los fieles y devotos rompieron en aplausos a la vez que la orquesta interpretaba la Fanfarria de la coronación.

Fue largo, intenso y muy merecido ese aplauso para un instante histórico, el que acababa de vivir la archicofradía de la Palma que ya puede guardar especialmente dos años, el de 1987 por la coronación de la Virgen de la Palma, y este 2022 con la de Las Penas. Se trata además de la única hermandad de Andalucía y España que cuenta con sus dos titulares marianas coronadas.

Entre las lágrimas y la emoción contenida de algunos asistentes sonaba el himno de la coronación por parte del coro de José Manuel Pedrosa. Un himno que ya todo Cádiz conoce y que sonó espectacular en el primer templo de la diócesis.

Coronada y luciendo espectacular, llena de estrenos, radiante, con su saya donada por la cuadrilla de cargadores, con un manto de camerín de color rojo, la Dolorosa de la Palma monopolizaba las miradas de todos los vecinos, fieles y devotos. Muchos, los que pudieron, estuvieron allí in situ para vivir en directo este Pontifical que fue emitido en directo por 7TV con los cofrades Jesús Devesa y Juan Mera.

Dos pantallas grandes servían también para esa retransmisión de la misa en el interior del templo en el que prosiguió la celebración con evidentes síntomas de fervor entre los fieles.

Tras la Comunión, el obispo dirigió de nuevo unas palabras a los asistentes: «Muchas gracias por vuestra presencia tan fervorosa y atenta». A partir de ahí se cantó la Salve a la Virgen y después nuevamente el himno de la coronación a la vez que el obispo Rafael Zornoza se fundía en un abrazo con el hermano mayor, Francisco Javier Lucero. Se producía entonces otro aplauso eterno y la junta de gobierno subía a los pies de la Virgen para las pertinentes fotos de familia.

Ahora sí, tras dos años de espera, la Virgen de las Penas ya estaba coronada. La Reina viñera es la séptima imagen coronada en la ciudad tras la Virgen del Rosario, la de la Palma, la del Carmen, María Auxiliadora, Dolores de Servitas y San José.

Procesión de alabanza

Tras la misa aún queda la intensa y emocionante tarde y madrugada con la procesión de regreso de la Virgen de las Penas Coronada a su barrio de la Viña, a su pequeña iglesia, a sus calles. Falta ese reencuentro con sus vecinos que esta vez es más esperado que nunca.

Para esta vuelta la imagen irá espectacular, con su manto de salida, en su paso de palio y con su corona. A las ocho de la tarde se abren las puertas de la Catedral y se iniciaba ese recorrido que llevará a la Virgen de las Penas por todo el centro de Cádiz. La banda de música del Carmen de Salteras acompaña musicalmente el caminar del paso portado por las cuadrillas de quien es su capataz desde hace ya treinta y cuatro años, Ramón Velázquez.

Artículo solo para registrados

Lee gratis el contenido completo

Regístrate

Ver comentarios