Sucesos | Cádiz
La violenta pelea en la Punta, una bronca entre un grupo de Jerez y otro de El Puerto
La situación se desbordó ante la falta de efectivos de la Policía Nacional: «Los radiopatrullas están solos y abandonados, puede volverse a repetir», advierten los sindicatos
Jupol insiste en la necesidad de aumentar los agentes en la plantilla de Cádiz y denuncia que al menos faltan entre 80 y 90 agentes
Una reyerta multitudinaria entre dos bandas en la Punta de San Felipe deja tres detenidos y varios policías heridos
A las cinco de la madrugada, a la hora que ya comienzan a cerrar las discotecas y toca la vuelta a casa, cuando el alcohol y otros 'aditivos' hacen más efecto en quien los consume de forma desmedida, en ese momento comenzaron a caer los primeros empujones. Las arremetidas que dos grupos de jóvenes hicieron que la Punta de San Felipe, en Cádiz, volviera convertirse en un escenario de peleas, botellazos, detrozos, puñetazos y carreras.
Unas cuarenta personas se enzarzaron en la parte alta de la Punta en una bronca multitudinaria que, según fuentes policiales, se desató por motivos desconocidos, entre dos grupos. Uno llegado desde Jerez (la mayoría de ellos, unos treinta), y otro de El Puerto.
Ante la situación se dio aviso a la Policía pero quienes pudieron acudir fueron sólo los agentes municipales que ante la cantidad de gente que había involucrada se vieron «desbordados». Los locales pidieron apoyo a Policía Nacional, pero, como les informaron, no había ninguna patrulla disponible en ese momento. Aún así pudieron detener a tres personas por delito de atentado contra los agentes de la autoridad cuando les agredieron, incluso con botellas de cristal.
Ante esta situación, el sindicato Jupol ha vuelto a incidir en la necesidad de ampliar la plantilla de policías nacionales en Cádiz o «volverá a ocurrir hechos como el de este pasado fin de semana», advierten. «Llevamos años reclamando más policías. Tenemos un catálogo -el número de efectivos que implanta el Ministerio en cada municipio- insuficiente, anticuado, mal diseñado, de hace más de 25 años, que no se ajusta a la realidad de la calle», lamentan.
«Los radiopatrullas están abandonados, solos. Los compañeros que están en la calle no dan muchas veces abasto. Si hay tres patrullas y tienen que estar en otros servicios (violencia de género, intentos de suicidios, robos...) no pueden estar en todos lados, fueron cuando pudieron». Y añaden: «Se hacen malabares para que siempre haya un mínimo de seguridad en la calle y no falten servicios pero sin más efectivos es imposible. El Ministerio del Interior, y por tanto la Dirección General, debería de tomar nota ya de una vez de que Cádiz necesita del orden de 80 ó 90 agentes más».
Este problema de una plantilla «escasa» se da desde hace años. Pero, según los sindicatos, se ha ido agravando con la creación de «nuevas estructuras que tiran de los mismos efectivos y lo que hacen al final es disminuir los policías en la calle».
Ocurre, entre otros recursos, con la Unidad de Prevención y Reacción (UPR), los agentes especializados precisamente en el control del orden público y grandes altercados, pero a menudo tienen que cubrir otros servicios en otras localidades en eventos como conciertos, ferias, fútbol o dispositivos especiales como controles y patrullas de lucha contra el narcotráfico en localidades como Sanlúcar ('operación Globo'). «Se les podría pagar como servicios extraordinarios pero no se paga porque no hay dinero o se paga poco. Si hubiera horas extras en condiciones se paliaría algo el problema».
Además los cuadrantes tienen que tener siempre en cuenta que haya agentes disponibles para 'puntos fijos' como los de seguridad en puerta de edificios como la Subdelegación del Gobierno, juzgados, DNI, además de calabozos, o las oficinas de denuncia, entre otros.
«Los jefes hacen lo que pueden pero no se puede cubrir todo con miserias ni sacar de donde no hay. Es un problema que se tiene que atajar desde el Ministerio porque si no seguirá pasando y algún día nos puede salir muy caro con alguna desgracia».