CÁDIZ
La transformación de la Punta de San Felipe
Los trabajos previos a la obra de Cala Chica, el 'beach club' que se ubicará en esta zona gaditana a finales de la próxima primavera, «avanzan a buen ritmo»
La Punta de San Felipe comienza a recobrar luz y las obras del proyecto Cala Chica empiezan a notarse en esta zona gaditana. Una considerable transformación que, previsiblemente, a finales de la próxima primavera, tendrá un aspecto muy diferente al que ha tenido durante los últimos años.
En estas últimas semanas, en plena temporada estival, ya se pueden ver los primeros trabajos y avances que transformarán el popular botellódromo. Será, en pocos meses, un nuevo 'beach club' con restaurante, terraza, piscina y auditorio para conciertos. Cabe destacar que se trata de un edificio concesionado por la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz.
En esta todavía zona de ocio nocturno se encuentran los trabajadores. No dejan ver mucho más detalles de los que ya son visibles. Los empleados de la constructora de la empresa Chiringuitour SL, liderada por el productor musical Omar Osuna, se encuentran en la zona realizando las labores previas a la obra, que «avanzan a buen ritmo», como confirma Osuna.
La constructora se hará con hasta ocho locales para crear en la zona una gran zona de ocio que «cambiará el ambiente que se respira allí desde hace muchos años». Porque la Punta de San Felipe no quiere ser otra cosa que un lugar «amable, sostenible y un entorno agradable para todos los públicos».
Estas obras tiene un plazo de ejecución de 6 meses y cuentan con un presupuesto de 1,1 millón de euros. Todo ello servirá para convertir la deteriorada zona en una superficie dividida en tres zonas. En él se podrá desde comer hasta disfrutar de de una piscina. «Lo hacemos en la calificación ambiental de tres actividades de hostelería que son auditorio con hostelería con música y actividad de esparcimiento con terraza», anunciaron el día que, por fin, Cala Chica ya era una realidad.
Los empresarios que van a formar parte de este proyecto estiman «que el número de empleos que pueda crear el complejo, de forma permanente o temporal, va a superar el centenar».
En este proyecto también forman parte el hostelero gaditano Raúl Cueto, el ingeniero y arquitecto técnico Javier Vázquez Selvático, director general de Edificarte Eventos SL y varios socios valencianos relacionados con The Music Republic, una potente empresa dedicada a la organización de festivales y conciertos.
Un hotel, otra de las inversiones
Otra de las transformaciones que se van a llevar a cabo en esta zona es la construcción del nuevo hotel de Puerto América. Un proyecto de rehabilitación del antiguo edificio 'Ciudad del Mar' para convertirlo en un cinco estrellas que ya recibió el visto bueno del Pleno del Ayuntamiento de Cádiz. Aunque eso sí, tendrá que esperar la luz verde por parte del Gobierno para que se trate de una realidad.
Inversión de 234.000 euros para intervenir en la zona peatonal del acceso a la Punta de San Felipe
El edificio sobre el que se están efectuando estos trabajos está situado en el Paseo Almirante Pascual Pery (suelo portuario). Se trata de una sucesión de pórticos que están separados en 4 metros y que finaliza al norte con un espacio de anfiteatro semicircular (lo que es conocido como la discoteca Momart).
Asimismo, hace apenas unos días, la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz anunciaba que se va a invertir 234.689 euros (IVA excluido) en la adecuación de esta zona peatonal. Esta intervención, que tiene un plazo de ejecución de 4 meses, supone el arranque de la recuperación total del espacio, que se realizará por fases, dentro del proyecto de integración del Puerto en la ciudad en esta zona.
El objetivo de la demolición es dejar libre el paso hacia la zona trasera del paseo, que además permite el acceso a la llamada 'playa de San Felipe', que se ha ido formando en los últimos años de forma natural por la dinámica costera propia de la Bahía, lo que pone más en valor el uso de la zona.
Estado actual de la Punta de San Felipe
El modelo de ocio de la Punta de San Felipe ha pasado por momentos de casi reinventarse, pero siempre se han encontrado más trabas de lo normal. Como un espacio para los más jóvenes y con un botellón al aire libre, siempre ha estado en recelo por la cantidad de reyertas que se generan en esta zona.
No se han producido trifulcas de la misma gravedad que aquel de 2004, pero en casi dos décadas han sido numerosas las peleas multitudinarias las que un fin de semana tras otro se han producido de madrugada.
Con todo, y a la espera de la finalización de estos proyectos, parece que esta vez sí es el final, lo que también obliga a un gran replanteamiento del ocio juvenil. Actualmente, dos de los antiguos bares de la zona continúan todavía con su actividad. Por lo que dentro de la transformación del ocio en la ciudad, otra de las grandes incógnitas que aparece con la nueva alternativa hostelera que se presenta en la Punta de San Felipe es qué va a suceder con el ocio juvenil.
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