Provincia
Las conexiones de Víctor de Aldama con la provincia de Cádiz
Caso Koldo
El empresario, en prisión desde la pasada semana, logró una concesión de dos edificios municipales en San Roque e intervino en la compra de un chalet en La Alcaidesa
La semana pasada era detenido el empresario Víctor de Aldama por un presunto delito de fraude en el pago del IVA de operaciones vinculadas a los hidrocarburos, decretando el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz su ingreso en prisión.
Aunque de Aldama ha operado como conseguidor en muy diferentes actividades a lo largo y ancho de todo el país y su nombre era de sobra conocido mediáticamente por su vinculación con el Caso Koldo, ha sido ahora cuando su situación procesal le ha vuelto a traer a la palestra, al mismo tiempo que siguen apareciendo informaciones sobre una trama que incomoda dentro del PSOE por las implicaciones que parecen afectar al exministro de Transportes José Luis Ábalos, otro hombre fuerte en el partido.
Precisamente en plena vorágine de titulares y noticias que denunciaban las prácticas que supuestamente llevaba a caso la mano derecha de Ábalos, el asesor Koldo García, es cuando de Aldama es vinculado con la provincia de Cádiz. Concretamente el pasado mes de abril, al saberse que estaba al frente de la empresa que logró la concesión de dos edificios municipales de la localidad de San Roque en 2021.
Dichas instalaciones son el edificio Rafael Alberti y la casa natal de Juan Luis Galiardo, actor que dio una enorme fama al municipio campogibraltareño. La idea era que ambas dotaciones fueran utilizadas como hoteles, negocio siempre atractivo para muchas entidades que apuestan por el sector turístico en la provincia, de ahí que llamase la atención que al concurso público sólo concurriera la empresa de de Aldama.
Aquella información avanzada por El Español ponía el foco en que el alcalde de la localidad, Juan Carlos Ruiz Boix, además secretario general del PSOE de Cádiz, podía estar presuntamente implicado en la trama corrupta por facilitar esta cesión de forma gratuita.
El regidor ha defendido en varias ocasiones que el contrato no requería de ninguna contraprestación económica por parte de la empresa World Magic in the Villages S.L porque en el mismo se especificaba que la firma concesionaria tenía que encargarse de la rehabilitación de los dos inmuebles, con una inversión mínima cifrada en un millón de euros, volviendo a manos del ayuntamiento sanroqueño tras un plazo de 40 años.
Ruiz Boix, uno de los diputados nacionales del PSOE por la provincia, expuso que su participación se limitó a firmar en el mes de octubre de 2021 la concesión, tal y como le obligaba la ley, ha reiterado, y que a dicho proceso pudo presentarse libremente quien hubiese querido.
A muy pocos kilómetros de allí, en la lujosa urbanización de La Alcaidesa, y según detalla la UCO en un informe, el empresario adquirió ese mismo año 2021 un chalet del que habría hecho uso durante el verano el exministro Ábalos.
En un plazo de pocas semanas se produjeron la concesión en San Roque, a través de una empresa a la que no se le conocía actividad previa y se adquirió un inmueble en una cotizada zona por un importe superior al medio millón de euros.
Dos hechos acaecidos en la provincia que coincidieron en tiempo precisamente con el abrupto cese de Ábalos al frente de la cartera de Transportes, una decisión que llamó la atención al ser uno de los hombres de confianza de Pedro Sánchez. Los motivos no estuvieron claros, aunque diversas fuentes cercanas al partido indican que el presidente invitó al valenciano a hacerse a un lado tras conocer un posible escándalo.
Conexiones con el mundo del fútbol
De Aldama fue presidente del Zamora CF hasta hace pocos meses, pero su nexo con el fútbol viene de lejos. Y es ahí donde vuelve a aparecer Cádiz, pues el empresario madrileño puso sus ojos en el club de la capital gaditana en 2009, como apuntó en aquel entonces el diario AS.
La operación estuvo lejos de cristalizar para tomar el relevo de Antonio Muñoz a los mandos de la entidad y mostró interés en otros clubes andaluces como el Córdoba, presentándose como accionista de entidades petrolíferas, sector que le ha costado años después su puesta a disposición judicial.
