Ayuntamiento de Cádiz
UGT Cádiz cree que Kichi deja una «herencia envenenada» a los próximos gobernantes
La sección sindical en el Ayuntamiento gaditano considera que en estos años se han perdido derechos «y avanzamos hacia un túnel incierto»
La sección sindical de UGT en el Ayuntamiento de Cádiz, tras el anuncio del alcalde de la ciudad, José María González Santos 'Kichi', de abandonar la política activa y no presentarse como candidato a la Alcaldía de Cádiz para el año 2023, ha hecho un recorrido por la «herencia» que dejará el regidor en la ciudad.
Recuerdan que su mandato se inició con una auditoria externa, que resultó un «completo fiasco» asegurando que «nunca más se supo de volver a licitar con otra empresa de mayor solvencia, eficacia y operatividad. Por lo que se mantienen múltiples tipos de discriminaciones y desigualdades entre la propia la plantilla municipal».
Por otro lado, en 8 años, «se han perpetuado las discriminaciones salariales, fruto del anterior equipo de gobierno, cierto, pero a las que no se han puesto freno ni enmienda, al contrario, se han mantenido y aumentado».
Apunta UGT a su vez que el Plan de Igualdad, obligatorio por Ley; «el protocolo de acoso sexual, instrumentos que nos ayudarían a garantizar la no discriminación y desigualdad por cuestión de género en la plantilla, y principios básicos de la ideología de izquierdas, ni están, ni se les espera».
Asimismo, insisten en el Acuerdo Regulador de condiciones de trabajo del personal funcionario, caducado desde el año 2010 manifestando que no hay perspectivas de solucionar este asunto que afecta a la generalidad de la plantilla municipal.
En estos casi 8 años, «no sólo no hemos mejorado ni avanzado en las condiciones, al contrario, hemos perdido derechos y avanzamos hacia un túnel incierto. Imaginamos que en plena precampaña electoral, pues la cuenta atrás ya ha empezado, al igual que empezaremos a ver inauguraciones a diestro y siniestro, se intentará sacar un Acuerdo Regulador, para contentar a algunos pocos, sin contemplar lo que venimos diciendo desde el principio, puesto que a la UGT no se nos ha escuchado nunca, lo que ha demostrado sectarismo y populismo».
Entre otras cuestiones no solucionadas «no se ha solventado ni se ha querido negociar cuestiones como el Teletrabajo, la compensación para los y las compañeros/as que tiene prevista su jubilación en breve (ya que lo que se nos trajo por parte de la empresa, era un engañabobos), se ha dejado de aplicar el premio de jubilación, ni por asomo hablar de los reconocimientos ginecológicos, y así un largo etc., demostrando una vez más, la actitud reaccionaria, que nada tiene que ver con los verdaderos propósitos de una izquierda que buscaría la igualdad y la justicia social».
Recriminan a su vez al alcalde que «estamos a finales de noviembre y a finales de diciembre finalizan los contratos del personal de programa, no sabemos aún que va a pasar con estos compañeros, y si habrá personal en enero para mantener abiertos los centros de Servicios Sociales».
Desde esta sección sindical resaltan a su vez la falta personal en todas las delegaciones municipales, en detrimento de los que siguen trabajando que se tienen que hacer cargo de sus tareas diarias y la de los compañeros que están en el paro pendientes de volver a entrar a trabajar. «Pero se mira para otro lado, y se soluciona pagando horas extras, algo que va en detrimento de la creación y el fomento del empleo, como buen sindicalista que es el alcalde y lo debe saber».
A juicio de UGT esta es la «herencia envenenada» que va a dejar el alcalde «a los nuevos gobernantes».
Por todo ello, le recuerdan al alcalde que aún está a tiempo, y que podría, en aras de la responsabilidad de hacer de Cádiz una ciudad mejor, «empezar a cuidar de su casa antes de irse, cuidar a los empleados municipales, esos que día a día trabajan porque Cádiz sea una ciudad mejor. Porque como es sabido, hay que cuidar de los cuidadores, para que éstos a su vez, ofrezcan los mejores cuidados y no caigan en el agotamiento físico y mental. Aunque mucho nos tememos, querido compañero, que tu parche final será en la línea de estos ocho años, y de nuevo, patada al balón palante, perpetuando las discriminaciones que seguirá dividiendo a la plantilla, en lugar de acercar posturas entre todos, para por fin, empezar a acabar con las injusticias, discriminaciones, etc».
