Cádiz, protagonista de 'el caso más extraño de Cuarto Milenio'

La provincia de Cádiz es uno de los escenarios favoritos de Cuarto Milenio. Se ha convertido en protagonista habitual del programa de Iker Jiménez, debido a la cantidad de fenómenos extraños que han sucedido en nuestra tierra. Este último domingo, la nave del misterio se dirigía concretamente a Barbate, donde los investigadores pudieron conseguir los testimonios de una familia que desde entonces no olvida aquella misteriosa noche.

El propio espacio televisivo lo define como 'El caso más extraño de 'Cuarto Milenio': el relato de una familia de Barbate, testigo de algo insólito'. Tanto, que el propio Iker Jiménez confesaba tener los pelos de punta.

En esta ocasión, fue José Antonio Caravaca quien se presentó en la localidad jandeña para recabar datos de lo sucedido. La familia barbateña empezó a escuchar un fuerte sonido, «como el de una nevera», pero no lograban localizar el origen. Apagaron todas las luces y los electrodomésticos pero el ruido persistía.

Entonces, una potente luz penetra desde la calle a través de la rendija de la puerta. El padre coge una escopeta y se pone frente a la entrada, dispuesto a apretar el gatillo si alguien entraba. A su vez, madre e hija se asoman por la ventana y aseguran ver, entre las luces, una procesión de piernas muy delgadas. Tanto, que le llamaron los 'hombres palo'.

El suceso terminó y nadie le encontró explicación. «Nos quedamos horrorizados, es algo que no se olvida». Después de tiempo (hay testimonios de 1998), no se ponen de acuerdo en señalar qué podría haber sido, no tienen ninguna explicación racional o lógica.

El caso más extraño de Cuarto Milenio.