ALJARAFE
Un profesor particular de Pilas acusado por abusar de un niño asegura que «jamás» se quedó a solas con él
El jucio contra este hombre, que se enfrente a una condena de doce años de cárcel, ha comenzado este jueves en la Audiencia de Sevilla
La Audiencia de Sevilla ha comenzado este jueves el juicio contra J.A.M.D. como presunto autor de un delito continuado de abusos sexuales a un menor . Los hechos, ocurridos en Pilas, se repitieron durante, al menos, tres años, un tiempo en el que el acusado aprovechaba las clases particulares que daba a la víctima para abusar de él. Si bien, en su interrogatorio, el acusado ha asegurado que «jamás» se quedo a solas con la víctima. «Imposible», ha añadido.
Profesor particular y músico , el acusado sólo ha respondido a las preguntas de su defensa. Lleva toda la vida dando clases particular a clases de diez alumnos, aunque algunos testigos han indicado que eran grupos de menos niños. La línea de la defensa es demostrar que en la casa donde se impartían las clases siempre había gente . La mujer del acusado, sus hijos o su suegra. Además, que había muchos turnos de clase. Todo para hacer ver que el acusado nunca se quedó a solas con el niño , que a veces salía tarde porque se quedaba rezagado haciendo las tareas.
Desde octubre de 2011 hasta abril de 2014 el acusado dio clases particulares al hijo de los denunciantes de estos hechos. El menor entonces contaba con ocho años cuando comenzó a acudir a la casa del profesor particular. El acusado, según la Fiscalía y el abogado de la familia, se aprovechaba de su superioridad por la edad y por la condición de profesor para cometer los abusos sexuales sobre el menor.
A veces, para conseguir quedarse a solas en su casa con el pequeño, le indicaba que se quedara al finalizar de las clases con la excusa de que no había acabado . Para que el niño no le rechazará en sus obscenas actitudes, el acusado le decía que «era por su bien». Hoy la madre ha dicho que le metía miedo a su hijo porque si lo contaba iría a la cárcel.
Los magistrados y las partes han escuchado el relato ofrecido por el menor a una psicóloga especialista en 2016 como prueba preconstituida. La reproducción del vídeo ha sido a puerta cerrada y los medios de comunicación han tenido que abandonar la sala.
Lo contó y se quedó tranquilo
Si bien, antes ha declarado como testigo la madre del menor . El matrimonio, por cuestiones laborales, abandonó Pilas y se fueron a vivir a Huelva. Allí, una noche, el pequeño, mientras en el informativos de la televisión contaban una noticia de abusos sexuales en Granada, le dijo a la madre que tenía que contarle algo a ella y a su padre, de viaje en Italia en ese momento.
«J.A. me ha agredido sexualmente», le dijo a la madre. « Me hacía cosas feas », añadió. Él se quedó «tranquilo», pero ella lo gestionó cómo pudo hasta la llegada del marido. Lo denunciaron el 12 de diciembee de 2014.
Ella ha recordado cómo muchas veces tenía que esperar en la puerta de las clases porque su hijo salía más tarde . A veces hasta una hora. Esto lo ha confirmado la madre de otra alumna y que era vecina del acusado.
La madre ha relatado las secuelas que los hechos dejaron en el niño, sobre todo, por las noches. Tenía que dormir con la luz encendida desde 2011 y sufrí a pesadillas . El niño, como consecuencia de los episodios que había tenido que padecer, evita bajo cualquier excusa ir al pueblo.
Doce años de cárcel
El juicio después ha contado con varias testificales de alumnos del acusado. Una compañera del niño víctima de los abusos ha confirmado que siempre se quedaba más tiempo del que duraba la clase «supuestamente porque no había terminado los deberes».
La Fiscalía considera estos hechos constitutivos de u n delito continuado de abuso sexual con prevalimiento sobre menor de edad, por lo que solicita una condena a doce años de cárcel , inhabilitación especial para ejercer actividades docentes por un periodo de quince años, libertad vigilada durante ocho años y la prohibición de acercarse o comunicarse con el menor.
Por su parte, la acusación particular reclama catorce años de cárcel para el profesor. Además, pide que el acusado indemnice al menor con 30.000 euros por los irreperables daños morales causados
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