Sucesos
El picadero de Mairena se desvincula del monitor detenido por agresión sexual
Fuentes del centro aclaran que el imputado no estaba en nómina sino que usaba sus instalaciones como profesor
El centro hípico de Mairena , donde ejercía el profesor detenido el 11 de agosto por presunta agresión sexual a una alumna, se desvincula del sospechoso, que en estos momentos se encuentra en prisión preventiva tras la denuncia formulada por la víctima, menor de edad.
Fuentes del citado picadero quisieron aclarar a este medio, que esta persona no forma parte de la nómina de su escuela sino que desde el pasado mes de mayo utilizaba sus instalaciones para el pupilaje de varios caballos. Además trabajaba con alumnos que había traído con él procedentes de otras escuelas. Si bien, ninguno de ellos es la joven de 15 años que acusa al monitor de agresión sexual.
Las mismas fuentes reconocen que la noticia de la detención de esta persona y su posterior ingreso en prisión ha sido «un jarro de agua fría» , ya que no sospecharon en ningún momento de una conducta ilegal ni tampoco recibieron quejas. Explican que accedieron a que usara el picadero porque tiene un «buen nombre» en el mundo del pupilaje y pensaban que podía beneficiar al negocio.
Este periódico ha podido saber que el imputado, que está casado y tiene un hijo pequeño , había estado trabajando durante los hechos denunciados en varios picaderos.
Fuentes oficiales de la Guardia Civil confirmaban la semana pasada la detención realizada por el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Mairena del Aljarafe. Sus efectivos habían recibido la denuncia de la chica, que previamente había relatado lo ocurrido a sus familiares. Tras obtener el testimonio de la adolescente, los agentes buscaron al sospechoso y procedieron a su arresto. Un trámite en el que apenas emplearon unas horas.
El profesor fue puesto a disposición del juzgado de Instrucción 14 de Sevilla, que estaba en funciones de guardia ese día, explicaron fuentes judiciales.
El testimonio arrojado por la víctima es contundente; de ahí que la autoridad judicial no dudara en ordenar el ingreso en prisión sin fianza y comunicada del denunciado. Una decisión acordada con el respaldo de la Fiscalía, que también tuvo en cuenta la condición de menor de la víctima y la gravedad de los hechos narrados.