Oriol Balaguer apuesta por el chocolate en la primera carta de otoño de La Duquesita
El laureado pastelero ofrece desde hoy nuevos postres artesanos y una línea de bombones clásicos y exóticos
La Duquesita está a punto de cumplir su primer aniversario tras ser reinaugurada en diciembre de 2015. Oriol Balaguer rescató del olvido este templo centenario para los más golosos – abierto en 1914 – y, ayer, presentó su primera carta de otoño en la que incluye nuevos postres artesanos, da mayor protagonismo al chocolate y estrena una línea de bombones . Elaboraciones exclusivas que arrancan con 12 sabores únicos. Siguiendo el espíritu de la primitiva pastelería –cuya fachada conserva el grabado original «Bombones y caramelos finos»–, Balaguer ofrece desde hoy creaciones en chocolate tradicionales como el crujiente, la vainilla, el anís, la naranja o la violeta.
También sabores más atrevidos como el yuzu, la maracuyá, el jengibre, los cítricos, el mango o la lima. Todo ello con la posibilidad de llevárselos a casa en estuches de 16 o 32 bombones o en una caja colección exclusiva de 72 piezas, ambos diseñados por Oscar Mariné . La Duquesita mantiene además su amplia carta de postres y tartas, incorporando este otoño la Tarta Sacher –de chocolate y frambuesa– y una nueva Tarta de Vainilla, gianduja y chocolate . Asimismo incorpora estos días una línea de macarons de frambuesa, fruta de la pasión, chocolate y yuzu y potencia la variedad de chocolates, con nuevas cajas de especialidades en 70%, con leche y blanco.
La pastelería centenaria mantiene las referencias más distintivas desde que reabriera el año pasado, entre ellas el Croissant , reconocido con el Premio al Mejor Croissant de España en el año 2014, la bollería de hojaldre y mantequilla, las palmeras de azúcar y chocolate, o el Panettone , uno de los productos emblemáticos, en sus tres versiones, gianduja y castaña, frutas y chocolate.