De La Sierra, la banda sonora de la indómita naturaleza americana
El proyecto musical de Miguel Ángel Varela, Nikki García y Luis Rod presenta su primer disco «Timescape» este jueves en la sala Tempo
En algún lugar entre los Apalaches y las Rocosas. Ahí bien podría haber nacido De la Sierra , nuevo proyecto musical formado por Miguel Ángel Varela, Nikki García y Luis Rod, que se presenta este jueves 9 de enero en la sala Tempo (Calle Duque de Osuna 8; 21.30h, 10 euros).
Siendo hijo del reconocido pianista Emilio Varela y la bailarina Marisa Montesinos, Miguel Ángel Varela ha respirado más música que oxígeno. De todos los instrumentos que toca desde niño (piano, dobro, mandolina, banjo), fue la guitarra la que le llevó a convertirse en un preciadísimo músico por artistas de la talla de Julio Iglesias o Camilo Sesto y gracias a su gusto por la música de raíces norteamericanas, se convirtió en uno de los guitarristas de pedal steel más destacados de este país.
Nikki García nace en España y tiene desde la infancia una fuerte atadura con Estados Unidos. Creciendo bilingüe, participa en grabaciones cantadas para publicidad en inglés desde los 17 años. A los 21 años se marcha un año a Mississppi, donde se expone de lleno al Blues, el Gospel y el Country . Nikki editó su primer disco en solitario de pop electrónico en 2017 y en 2019 dio voz a Jasmine en castellano en la película de Aladdín. Luis Rod ha llevado su potente voz a cientos de escenarios de todo el país. Su vida personal le ha llevado a vivir a sitios como la isla de Skye en Escocia, a Vermont o al estado de Georgia. La unión de Luis con la música norteamericana es fuerte y longeva y su presencia en el escenario así lo demuestra. No es de extrañar que cuando los tres se juntaron con una guitarra por primera vez surgieran melodías que recuerdan a y armonías que beben del Gospel. Una mezcla de Folk con esencias de Country, Blues y un directo orgánico que acaba desembocando en el Jazz. Americana made in Spain.
Estaba claro que de tres historias como estas y una vida que se reparte entre los grandes estudios de sonido de la ciudad y la vida en las montañas, debía nacer este proyecto tan de ellos que es De La Sierra . Jose Bueno a la guitarra y Marco Niemietz (actualmente también en la banda de Diego el Cigala) al bajo, dos virtuosos músicos de nuestra generación, terminan de redondear el sonido de este álbum. «Timescape» contiene once temas que nacen de ideas a la guitarra de Varela y letras de Luis y Nikki. Letras que versan sobre anhelos, recuerdos o la incapacidad de retenerlos. En ellas se vislumbra una clara influencia de Tom Waits o Jeff Buckley . De algún modo «Timescape» ofrece un paisaje de tiempo, un crono paisaje, donde fluyen las armonías exactamente igual que lo hace la amistad que los une. Esta música surgió de manera tan orgánica y estaba tan ligada a las historias personales de cada uno que parecía haber estado ahí siempre.
¿Qué se va a encontrar la gente en vuestro concierto en Tempo?
Trataremos de crear un vínculo emocional con el oyente. Será como un viaje entre amigos con paradas en los parajes más cautivadores del estilo de la música Americana.
Cuando se formó el grupo, ¿tenía unas metas claras o fue más bien un dejarse llevar por la espontaneidad?
El grupo se formó en el 2017. Todos nos dedicamos profesionalmente a la música y nuestro día a día transcurre entre estudios de grabación. Tenemos nuestro propio estudio en un pueblo de las montañas de Madrid. En un momento en el que coincidimos trabajando surgió la idea de versionar alguna que otra canción, lo que nos llevó, al ver el resultado a desempolvar ideas y crear temas nuevos. Cada vez nos sorprendíamos más. Fue como una tormenta de ideas.
¿Cómo fue el proceso creativo de “Timescape”, teniendo en cuenta que se trata de un primer disco?
Nuestra primera premisa fue disfrutar. Amamos la naturaleza y a los animales. Empezamos a grabar, perros incluidos, en verano entre piscina, barbacoas y paseos interminables visitando a nuestros amigos equinos. Luego fuimos cambiando de estación y las canciones nacieron de momentos de chimenea.
¿La grabación tuvo algún modus operandi en particular? ¿Quizá optasteis por grabar en directo?
Buscamos la textura orgánica de los instrumentos y por lo tanto huimos de cualquier artificio. De esa manera lo que fue grabado se lleva al directo sin deformación. Nuestro tempo es totalmente humano en la mayoría de las canciones, para que sea la interpretación el único vehículo de la emoción. A nivel técnico, damos mucha importancia a el ambiente, ha de sonar el espacio de alguna manera para que la canción esté viva.
¿Cómo ha sido vuestro recorrido en directo hasta el día de hoy?
Todos tenemos recorrido con diferentes artistas y formaciones pero en lo que a De La Sierra se refiere nos ha sorprendido gratamente la aceptación del público. Somos como una familia y eso se percibe.
¿Hay algún terreno sonoro en particular al que os gustaría dirigiros en el futuro?
No tenemos pretensiones de estilo porque grabamos lo que surge. Pensamos que las canciones te buscan a ti, que llegan del lugar donde se crean las cosas bellas y tenemos la suerte de que pasan por nuestras manos. Nuestro disco ya es bastante ecléctico. Nos gusta toda la música con valor estético, claro.
¿Os sentís parte de una escena concreta? ¿hay afinidad con otras bandas coetáneas de la escena nacional?
Curiosamente colaboramos en ambas direcciones con Young Forest, trio folk con unas canciones maravillosas. Salvador Daza ha grabado las violas de nuestro disco. Compartimos un tipo de público muy concreto.
¿El disco ha generado interés de festivales veraniegos?
Parece que sí, hay dos festivales de momento pero confirmación definitiva aun no tenemos.
De la Sierra es un nombre muy visual, que también puede remitir a un tipo de sonido muy particular. ¿Cómo surgió?
La persona a la que se le ocurrió el nombre es un amigo comun. Xavi es guionista. Mientras los demás estábamos extasiados con la música nos observaba, portátil en mano, dedicado a su trabajo. Nos gustaría seguir disfrutando del proceso creativo y que nuestra música llegue a difundirse lo más posible. Ya estamos componiendo para el segundo disco. Ojalá «Timescape» nos lleve a muchos lugares, queremos viajar con nuestro disco bajo el brazo.