Cuestión de urgencia
Los dispositivos de cuidados críticos y urgencias del SAS atienden una media de siete avisos cada día en Jerez y el 50% se trasladan al Hospital
Actualizado: GuardarSuena el teléfono y saltan de la silla como un resorte. Hay una urgencia y el dispositivo de cuidados críticos y urgencias del SAS (DCCU) de Jerez, que tiene base en el centro de salud de Montealegre, se pone en marcha en menos de medio minuto. Esta vez les ha tocado a Isidoro Reyes, Fernando Trujillo y Juan Sánchez salir en busca de un herido o enfermo que necesite atención médica.
Trabajan turnos de catorce o 24 horas y reciben aproximadamente una media de siete avisos por jornada: «Desde que nos indican la dirección solemos tardar ente siete y diez minutos en llegar a cualquier zona de la ciudad. En el caso de las pedanías es distinto porque hay algunas que están a más de 20 kilómetros de distancia».
Entre todos los casos que reciben, el 50% de ellos son transferidos al Hospital: «Los otros se atienden en el domicilio y se quedan en casa si no es necesario el traslado», asegura Reyes.
Estos experimentados profesionales de urgencias tienen una cosa muy clara, como dice la doctora de una unidad de DCCU, Pilar Rodríguez: «Hay muy mala educación sanitaria y la gente utiliza el servicio cuando no debería. Recibimos llamadas muy alarmantes para situaciones que se pueden solventar fácilmente en el centro de salud de atención primaria».
Cuentan que han acudido a visitar enfermos que tenían una urticaria o que los han llamado para que les cambien la bolsa de orina o que no querían esperar a acudir a una cita con el especialista. «Siempre digo que mientras yo estoy atendiendo a alguien que no lo necesita de manera urgente, el hijo de esa persona puede estar sufriendo un accidente grave», explica. Lo mismo piensa el enfermero Fernando Trujillo: «Tienen una falsa idea de solidaridad cuando hacen un mal uso de los servicios».
«Lo más desagradable es luchar contra la impaciencia de la familia del enfermo y lo más gratificante es ver cómo un paciente que has atendido en los primeros momentos sale adelante», asegura el médico, Isidoro Reyes.
Según el tiempo
Durante el verano aumentan las asistencias a personas mayores por descompensación de la tensión y el calor. Por el contrario, en invierno es época de alta frecuencia de gripe y la humedad provoca agravamiento de problemas respiratorios. Eso sí, «un domingo en Jerez en verano es muy tranquilo, empieza a haber más casos cuando la gente vuelve de la playa por las tardes», asegura el técnico de transporte sanitario, Daniel Sánchez.
«Es fundamental la labor del equipo y la coordinación porque de eso depende que la cosa funcione o no», insiste.
Tras volver de un aviso, los tres miembros de cada equipo de urgencias se dedican a reponer el material que hayan utilizado de la ambulancia. «No prestamos tantos servicios como en el Hospital pero hacemos un prediagnóstico y damos las primeras soluciones al enfermo. Nuestro objetivo es que el paciente llegue en las mejores condiciones al Hospital», explica la doctora.
Cuando les toca certificar la muerte de alguna persona, el equipo se queda junto a los familiares si lo necesitan: «A veces, hemos estado hasta tres horas en el domicilio. No sólo damos atención médica sino que también servimos de confesores y de apoyo moral a los familiares de los pacientes».