Los tripulantes del pesquero cargado con 3.500 kilos de coca ingresan en Puerto II
La Policía detiene en Galicia a una sexta persona a la que se considera testaferro del clan de los Piturros
Actualizado:La llegada prevista a Cádiz del pesquero Pietertje, en el que viajaban cuatro tripulantes con un cargamento de 3.500 kilos de cocaína, estuvo precedida por la entrada en el muelle Alfonso XIII del buque de la Armada Infanta Cristina. Este barco militar colaboró en el abordaje del barco de los narcotraficantes, que se realizó en la madrugada del miércoles a 500 millas de la costa de Cádiz, en las inmediaciones de Las Azores.
Del Infanta Cristina bajaron los cuatro tripulantes detenidos, que esperaron en dependencias portuarias a que arribara el Pietertje. El pesquero fue remolcado hasta el puerto por la embarcación de Vigilancia Aduanera, Gerifalte I, y cuando estuvo atracado, se procedió a la descarga de la droga. Según explicó el jefe de la sección de cocaína de la Udyco central de la Policía Nacional, Miguel Muñoz, los fardos estaban guardados en un camarote. Con la ayuda de una grúa, los paquetes -que pesan unos treinta kilos cada uno- fueron depositados en el suelo en presencia de los cuatro detenidos: tres españoles (Manuel Vázquez, Roberto Núñez y Ventura Riobó), y un colombiano (José Antonio G. H.).
El pesquero apresado había sido interceptado después de una larga travesía. Había zarpado a finales del mes pasado de Canarias con destino a América. Su destino concreto era el Archipiélago de San Andrés, en la zona del Caribe, donde quedó fondeado. Los fardos fueron trasbordados al pesquero mediante lanchas rápidas.
Éste hubiera sido el mismo sistema que habrían aplicado en las costas españolas si el Pietertje no hubiera sido interceptado. Según el jefe de una de las secciones de la Udyco, probablemente las embarcaciones que tendrían que transbordar la droga saldrían de distintos puertos del norte de Portugal y de Galicia, ya que «un cargamento tan pesado es imposible de alijar en un único punto».
La Policía Nacional definió la operación como prototipo de las que desarrollan los narcos gallegos, que se encargan de la infraestructura necesaria para el transporte marítimo; mientras que sus socios colombianos suministran la coca y la distribuyen en España y Europa. Los acuerdos que suelen sellar los traficantes españoles en este tipo de organizaciones contemplan como precio a su colaboración el 20% de la mercancía, que suelen vender en suelo español.
Los detenidos fueron llevados a la cárcel de Puerto II, después de que el juzgado central de Instrucción nº4 de Madrid ordenara su ingreso en prisión. En los próximos días serán llevados a Madrid para que declaren ante el juez.
En esta operación, bautizada con el nombre de Ceniza, la Policía ha arrestado también en Madrid a un colombiano más, Eustacio G. B., y a un sexto integrante de la organización, Jorge Silles. Esta persona fue apresada el jueves en Sanxenxo (Pontevedra), y según pudo saber este periódico, se le considera un testaferro del clan de los Piturros, que lidera Manuel Vázquez, de 62 años, y «un histórico del narcotráfico en Galicia, que comenzó en los 80 con el contrabando de tabaco». Al parecer, pudo ser la persona que compró el pesquero requisado. La Policía mantiene la operación abierta y se busca, sobre todo en Galicia, otros eslabones de esta cadena delictiva.
La droga incautada, si se vendiera cada kilo al por mayor, alcanzaría en el mercado un valor cercano a los 84,3 millones de euros. Unas ganancias que se multiplican dada la elevada pureza de estas partidas que permiten una mayor adulteración