Una infamia para Andalucía
Actualizado:Hace unos meses decidí adquirir cada domingo el coleccionable que El Mundo distribuía con su diario sobre la Guerra Civil. Pues bien, resulta que en los meses de julio y agosto de 1936 no aparece, ni siquiera se nombra a Blas Infante, teniendo en cuenta su actividad en el mes de julio sobre el proceso de Estatuto de Andalucía y que el 2 de agosto fue detenido por falangistas y que en la madrugada del día 11 del mismo mes fue fusilado, conviertiéndose así en una de las primeras víctimas políticas de la guerra. A pesar de ello, ni se le nombra. Pero voy a más, a lo largo del resto de la colección tampoco, y para colmo de los colmos sólo aparece en el tomo 30 y alrededor de un personaje como Ramón Franco. Recordemos a Ramón Franco, una persona que paso de ser héroe del Plus Ultra a villano, de republicano a militar en las filas franquistas con su hermano Franco. De gran piloto a excéntrico y loco de la familia. Su muerte fue una incógnita, una más a la larga suma de accidentes de aviación -Mola, Sanjurjo, García Morato... -que se atribuían a sabotajes para allanar el camino al dictador Franco. La infamia está en citar a Blas Infante sólo en el capitulo donde se habla de Ramón Franco, como su amigo, como otro loco capaz de vestir con chilaba mientras predicaba el andalucismo y de aclamarlo como un Mesías que quería cumplir el sueño de dar tierra a los jornaleros y acabar con los latifundios. Como si fuera una broma, así se trata al padre de la Patria Andaluza en esta colección. Sepan que Blas Infante fue algo más, que inventó el andalucismo, que fue el responsable de nuestra bandera, basándose en la historia -y rescatando del tiempo-, quizás una de las más antiguas del mundo, que compuso un himno basándose en el Santo Dios, que cantaban los jornaleros y segadores a la salida y a la puesta del sol. Y además compuso una letra -al menos tenemos letra, los españoles no pueden decir lo mismo-, y teniendo en cuenta que nuestro himno es uno de los pocos de Europa que no están basados en una marcha militar. Defensor de los pobres, de la incultura, del subdesarrollo, del hambre que Andalucía venia sufriendo, impuesta por una conquista castellana-aragonesa-leonesa, por una España creada a base de pactos y de bodas para conquistar una tierra, la andaluza, que por aquel entonces vivíamos mucho mejor que el resto de España. Que Andalucía no consiguiera su Estatuto de Autonomía en el 36 lo frenó una guerra y el fusilamiento y muerte del Padre de la Patria Andaluza, como así reza en nuestro actual Estatuto, constituyéndose la figura mas importante y destacada del nacionalismo andaluz de todos los tiempos. Fue abanderado de la reforma agraria, denunciando así el robo de las tierras andaluzas, por conquista, y creándose los grandes latifundios andaluces dirigidos por caciques foráneos y generando y convirtiendo a la tierra más rica de la península, en la más pobre. España hundió a Andalucía y Blas Infante así lo denunció y por ello trabajó, para que los andaluces pudieran gobernarse así mismos. No dudo del rigor de su obra, pero tampoco lo hago de la infamia que supone para Andalucía no incluir en su obra esta fecha, lo que sucedió y a Blas Infante. Y espero que para otra colección no olviden a quien muchos andaluces tenemos presente. «Era un verano luminoso como todos los veranos andaluces».
Ángel G. de la Torre. Puerto Real