Japón despliega sus buques de guerra y fuerza aérea ante la amenaza de Corea del Norte
EE UU reconoce sus limitaciones para protegerse del lanzamiento de un misil de largo alcance
Actualizado: GuardarJapón reconoció ayer que ha puesto en alerta a parte de su flota y fuerza aérea con el propósito de vigilar los preparativos de Corea del Norte para lanzar un misil de largo alcance, capaz de impactar incluso en territorio de Estados Unidos. En un comité parlamentario de seguridad, el director general de la Agencia de Defensa del país nipón, Fukushiro Nukaga, confirmó que Tokio ha desplegado varios buques de guerra y aviones de patrulla a fin de observar los posibles movimientos de Pyongyang en esta crisis.
Según la prensa, Nukaga podría referirse a embarcaciones con sistema de captación Aegis, cuyo núcleo es un radar AN/SPY-1 capaz de monitorizar hasta cien blancos simultáneos y detectar misiles balísticos en cuanto son disparados.
Estos dispositivos de rastreo Aegis forman parte del sistema de defensa antiaérea que Japón desarrolla con Estados Unidos, dentro del escudo antimisiles de este país para el Pacífico noroccidental.
El peor escenario
Además de esa vigilancia marítima y aérea, la Agencia Nacional de Policía de Japón anunció ayer que se está preparando para «el peor de los escenarios», en caso de que Corea del Norte lleve a cabo el lanzamiento del misil. El temor citado por el comisario general de Policía, Iwao Uruma, «es que la cabeza del proyectil o fragmentos del mismo puedan caer en territorio nipón por error». «Tenemos que asumir la posibilidad de que la gente tenga pánico», afirmó Uruma, quien adelantó que su departamento tiene previstas operaciones de salvamento ante eventuales daños y también de búsqueda de los restos del misil.
Por su parte, Estados Unidos reconoció ayer que su sistema de defensa antimisiles tiene una «capacidad operativa limitada» para protegerse de proyectiles de largo alcance como el que Corea del Norte prepara, al tiempo que descartó un ataque preventivo contra ese país. Asimismo, el consejero de Seguridad Nacional de Washington, Stephen Hadley, pidió a Pyongyang que abandone cualquier plan para probar el misil balístico con capacidad de alcanzar suelo norteamericano.
Mientras, la tensión en el este de Asia por la crisis no deja de aumentar. El Kremlin expresó ayer al embajador de Corea del Norte su preocupación por las últimas informaciones de que Pyongyang.