Sete Gibernau será operado de la clavícula tras su caída en el Gran Premio de España

Sete Gibernau será operado hoy martes de la rotura de clavícula que se produjo en la primera curva del circuito de Montmeló. El piloto catalán no recordaba los detalles del accidente. Se encontraba dolorido, aunque mucho mejor después de pasar la noche del domingo en la Clínica Dexeus, donde se le realizó un TAC cerebral y un escáner para confirmar que el impacto no había provocado lesiones neurológicas.

Los resultados fueron favorables y Gibernau pasará por el quirófano para reparar su clavícula izquierda dañada. Será baja segura en Assen y probablemente también en Donington, aunque eso no es nada para lo que podía haber pasado tras una caída que trajo a la memoria de muchos, aquel fatídico accidente que dejó a Wayne Rainey en una silla de ruedas.

Por su parte, el italiano Loris Capirossi fue dado de alta ayer por la mañana y viajó hasta su casa en Montecarlo, con la firme determinación de viajar posteriormente a Holanda y tomar parte en el Gran Premio que se celebrará el próximo sábado. También Marco Melandri mantiene la esperanza de poder tomar parte en la prueba de Assen, aunque el italiano continua ingresado en el Hospital General de Cataluña. Sigue con molestias cervicales, pero es optimista y continúa en observación. El italiano cree que será dado de alta hoy mismo y también tiene intención de viajar hacia Assen, donde espera poder correr.

Al margen de las caídas, entre las anécdotas positivas, la brillante actuación de Alex Debón (Fortuna Aprilia) en 250 cc, tras llegar como suplente del lesionado Héctor Barberá, y de Pol Espargaró, que puntuó en 125 cc. con sólo quince años y en su condición de invitado al Gran Premio de Cataluña por la organización.

Tras Montmeló, Rossi, Dovizioso y Bautista salen reforzados y las citas inminentes se apuntan clave para desgracia de Sete, Capirossi y Melandri, los grandes damnificados del fin de semana.