Los X-Men de la música española

No les importa la política económica internacional (G-7 más Rusia), no conocen a los mandamases del fútbol europeo (G-14), pero se hacen denominar G-5, «el grupo más tieso del mundo», afirma Marcos del Ojo.

Kiko Veneno (José María López San Feliú , Los Delinqüentes (Marcos del Ojo y Diego Pozo), Tomasito (Tomás Moreno Romero) y Muchachito Bombo Infierno (Jairo Perera Biedma) se han encerrado durante unos días en el Estudio La Bodega de Jerez (Damajuana) para dar formar a lo que será su primer trabajo discográfico en estudio pero con edición en directo.

Hasta el momento no tienen claro como quedará este trabajo final, ya que los componentes del G-5 cuentan con su propia banda y entre los bolos y las giras no hay fechas para seguir con la grabación del mismo.

«Cuando todo encaje y el disco sea redondo, lo sacaremos», afirma Muchachito Bombo Infierno.

De hecho, Diego Pozo asegura que una vez el disco este concluido «saldrá al mercado, pero no tenemos intención de hacer una promoción especial con él, es sólo un trabajo de varios amigos».

La producción corre a cargo del propio G-5 con la colaboración del productor José Manuel García-Pelayo y del técnico de sonido oficial con el que graba Kiko Veneno, Jacobo.

Al respecto, Muchachito Bombo Infierno asegura que «es una producción competente, con fe, pero sin caras ni ojos. Todos trabajamos en el disco, componemos, hacemos las letras... Contamos con el compás de Tomasito, Diego es una enciclopedia con patas, Pelayo es un cielo y Jacobo un monstruo, y que te puedo decir de de Kiko y de Marcos, pues que será un trabajo consistente, pero que se hará poco a poco, sin prisas».

De momento, son diez las canciones que los integrantes de G-5 han grabado durante estos cinco días, aunque deberán hacer una elección de cuáles finalmente integrarán este primer trabajo discográfico.

Aunque una de ellas Money, Money... rula por internet y fue presentada en el programa de Jesús Quintero (El Loco de la Colina) hace unos meses, lo cierto es que los componentes del grupo no tienen claro como se llamarán los temas del disco. «Cada una tiene tres o cuatro nombres. Nos gustan todas, pero tendremos que hacer una selección», asegura Jairo Perera.

Pues eso, que entre toma y toma, calaita y calaita, y oloroso y más oloroso, y mucho cachondeo, los G-5 hacen un paréntesis para explicar a LA VOZ los entresijos de este trabajo «espontáneo y sin otro particular que divertirnos y hacer música».

«Los grupos no lo forman nadie, salen solos. Nos encontramos en muchos conciertos y decidimos reunirnos para hacer algo juntos, seguir y estar en la movida», comenta Jairo (Muchachito Bombo Infierno) con su carisma tranquilo después de un inicio de entrevista que parece más un gallinero que una audiencia pactada de promoción a la que se niegan.

«Para hacer canciones y disfrutar juntos. Y dijimos, pues vamos a hacer la prueba y nos sentamos a componer todos a la vez. Nos sentamos en una mesa redonda con nuestro queso y nuestro carrete de fotos en Villafrutada de la Riviera y nada más», comenta Marcos del Ojo.

Es un encuentro por la «admiración mutua, respeto total y un mérito enorme (risas). Siempre nos lo hemos pasado muy bien juntos cuando nos encontramos en un concierto y nos ponemos a ensayar en el escenario, y había ganas de hacer algo juntos», comentan al unísono Marcos, Diego y Tomasito.

Esta conexión catalana-andaluza no es más que una excusa de unos grandes músicos a los que les gusta venir por esta tierra y por el contacto que tienen con José Manuel García-Pelayo, el productor y propietario de los estudios La Bodega, con quien ya han trabajado, además «del vino que nos tomamos y el cachondeo, y lo bien que nos lo pasamos», confiesa Marcos del Ojo, mientras Muchachito aclara que «llevo dos semanas sin ver a mi gente, pero me siento como si estuviera en mi casa». «No lo vas a estar si te has duchado aquí todos los días», le responde Marcos del Ojo.

Podrían ser los X- Men de la música española. Tantos días juntos y entre partido y partido del Mundial han tenido suficiente tiempo para ponerse motes: Tomasitio, Capitán Calambre, Alambrín, Carachapa, y «yo soy el que metió el segundo gol de Corea», se autodefine Diego Pozo. «No veas como corre el gitano», añade Marcos del Ojo.

Un nuevo producto que sale de la factoría jerezana y que a buen seguro sorprenderá.

Según los integrantes de este nuevo formato musical «no pretendemos hacer promoción, sólo grabar



«No hacemos