Maragall califica la victoria del Estatut de «rotunda e inapelable»
El president ha anunciado el inicio de una nueva etapa en la que la sociedad catalana se sentirá "más cómoda y comprendida"
AGENCIAS | MADRID Actualizado: GuardarEl presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, ha proclamado hoy el fin del "victimismo" en Catalunya con la aprobación en referéndum del nuevo Estatut y ha afirmado que, a partir de ahora, "lo que seamos y hagamos dependerá de nosotros mismos más que nunca". El presidente de la Generalitat ha dicho que "el país ha ganado, todos han ganado", se apoyara o no el Estatut e hizo un llamamiento a ERC y PP para que se integren al consenso y se alejen de la "práctica irritada de la política".
Maragall ha comparecido ante los medios de comunicación en la sala Torres Garcia del Palau de la Generalitat mientras en el Pati dels Tarongers lo seguían por televisión el medio millar de invitados a la recepción organizada con motivo del referéndum del Estatut. El presidente ha aceptado un par de preguntas, la primera de ellas sobre su futuro político, y que, como es norma desde hace semanas, rehusó contestar recordando que "no es el tema de hoy".
No obstante, sí ha aceptado que el Estatut es "bueno para todos en cualquier escenario" y ha comprometido "todo su esfuerzo" en el despliegue de la nueva norma estatutaria. Así, ha asegurado que "en poco tiempo" se comenzará a percibir la potencialidad del nuevo Estatut. Maragall ha recordado que cuando asumió la presidencia de la Generalitat pidió "paciencia, tenacidad y determinación a raudales" y ha esgrimido su "compromiso personal" de perseverar pese a que "las dificultades nos podían hacer desfallecer".
Su objetivo siempre ha sido, ha insistido, "mejorar el Estatut y hacerlo más allá de intereses partidistas legítimos", convencido de que "hay causas nobles que exigen de todos altura de miras y ambición de país". En este sentido, ha reafirmado su determinación por "una Catalunya posible, la Catalunya del Progreso y el sí exigente" que, ha dicho, "está bien viva".
El presidente catalán ha calificado la victoria del sí de "rotunda e inapelable" y ha dado las gracias al pueblo de Catalunya por la "lección de civismo y madurez democrática" que ha supuesto esta jornada. "Catalunya ha hablado claro. Ahora todos tenemos que estar a la altura de lo que ha dicho", ha dicho Maragall , subrayando que los catalanes "han escrito una página de nuestra historia expresándose con libertad". "Hemos ganado el reto que nos habíamos puesto como país", ha añadido y ha recordado que "los votos negativos no pasan de una quinta parte de los votantes. El país ha ganado. Todos han ganado, los que han votado una cosa y la otra".
Maragall ha asumido el papel de "presidente de todos los catalanes" para reconocer la "legítima contribución democrática de los que no han votado sí, de los que querían más, también de los del otro extremo", en referencia a ERC y PP, y ha invitado a unos y otros a "integrarse en el consenso y alejarse de la práctica irritada de la política que nunca debería practicarse". Según Maragall, hoy es "un día para celebrar lo que nos une a todos" y a todos pidió que "estén a la altura".
Mensaje a España
También ha habido mensaje para la Junta Electoral Central (JEC) y tras admitir que "como demócratas nos habría gustado una participación más alta", ha lamentado las "difícilmente comprensibles objeciones judiciales a las que hemos tenido que enfrentarnos desde el gobierno".
Pese a todo, Maragall ha apostado por trabajar con "determinación para encarar el futuro colectivo". "Podemos afirmar que en Catalunya se ha acabado el victimismo. No puede haber". "Lo que seamos y hagamos dependerá de nosotros mismos más que nunca. Tenemos el mejor Estatut que hemos tenido nunca. De ahora en adelante nos esperan todas las oportunidades que como país nos hemos ganado. El futuro de Catalunya no había sido nunca tan esperanzador como es ahora ni tan prometedor", ha concluido.
Maragall ha lanzado asimismo un mensaje en castellano para el "resto de España" a quien ha explicado que Catalunya "inicia una etapa de su autogobierno, que será larga y positiva. Catalunya se sentirá más cómoda y mejor comprendida por la España plural que avanza", ha dicho.