Buen comienzo de Jiménez y Sergio García en la jornada inaugural

Colin Montgomerie, el héroe de la pasada Ryder Cup, el jugador que infringió la derrota al equipo americano en su propio terreno, domina el Open de Estados Unidos, segundo torneo de Grand Slam de la temporada, con la que, al cierre de esta edición, era la única tarjeta bajo el par del campo: 69 golpes (-1). El escocés salió en los primeros partidos de la mañana, cuando menos viento hacía, y tuvo un comienzo comprometedor con dos bogeys en los tres primeros hoyos del recorrido, quizá los más difíciles del campo de Winged Foot y que se cobró víctimas importantes como Tiger Woods (bogeys del 1 al 3). Sin embargo, Montgomerie hizo valer su título de 'Mejor Jugador del Mundo en Recuperarse y Volver' que consiguió el pasado mes en los Premios Laureus otorgados en Barcelona, conocidos como los Oscar del deporte.

Al cierre de esta edición, con pocos hoyos en su haber, Miguel Ángel Jiménez compartía la cuarta posición (par del campo) con una quincena de jugadores entre los que se encontraban los favoritos Phil Mickelson, Jim Furyk o Michael Campbell, defensor del título. Un resultado excelente para el jugador malagueño, que al igual que Sergio García comenzó su vuelta por el hoyo 10 del campo. Les quedaba lo más complicado, los hoyos 1 y 2, los más difíciles según las estadísticas. García también compartía la cuarta plaza hasta que en el hoyo 14 cometió un bogey que le hizo descender hasta el puesto 25 de la tabla. El castellonense comenzó muy seguro y hasta tuvo una oportunidad de birdie en su tercer hoyo, cometiendo muy pocos errores, con muchas dosis de paciencia. El que pudo terminar su vuelta, aunque con poca fortuna, fue José María Olazábal, que hizo 75 golpes (+5) sin un birdie en su tarjeta. Y es que los greens sembrados no se le dan nada bien al vasco, que se fue a la Casa Club en el puesto 86 de la tabla, más fuera que dentro del torneo.

También hay que destacar el sorprendente inicio del gran favorito Tiger Woods, que cometió tres bogeys consecutivos en los tres primeros hoyos, salvando con el par su cuarto compromiso con el green. Un resultado poco habitual para el número uno del mundo, que volvía a la competición tras nueve meses de parón.