Comenzar a vivir de nuevo
Alcohólicos Anónimos cumple 71 años desde su fundación en España, un tiempo en el que muchas personas han conseguido dejar la bebida con coraje
Actualizado:Hola, me llamo (Óscar, Luis, Gloria o Maite) y soy alcohólico». Este es el primer y duro paso que decenas de personas intentan dar a diario en la ciudad para poder abandonar de forma definitiva una amarga compañía que durante años les ha llevado a la soledad y que, en no pocos casos, les ha guiado sin remedio hacia la muerte. El alcohol es una droga que como tal provoca adicción, una adicción que se hace insostenible para el organismo que llega a rendirse ante sus efectos más negativos.
Antonio, David y Juan Luis sabe muy bien los oscuros caminos de esta enfermedad. Los tres perdieron muchas cosas por el camino y sólo las ganas de vivir y de luchar lograron acabar con su antigua forma de vivir.
Para David el punto de inflexión que transformó su vida en otra fue la advertencia de los médicos ante su delicado estado de salud. Su organismo no aguantaba ni una gota más de alcohol y si seguía bebiendo no le daban ni 48 horas de vida. «Comencé a beber como todos los jóvenes, de fin de semana en fin de semana, hasta que la cosa se complicó más de la cuenta. Mi vida se convirtió en un auténtico infierno e incluso quise morirme, mi relación con la familia comenzó a desmoronarse y me fui quedando poco a poco solo», explica David.
Su historia personal, dura por sí misma, le hizo reaccionar a tiempo y encontrar una salida a través de Alcohólicos Anónimos donde actualmente, tras cinco años sin probar nada de alcohol, presta toda la ayuda que puede a las personas que tímidamente se acercan.
Una de estas personas fue Antonio, quien tras más de 10 años decidió dar el paso de acercarse hasta uno de los cinco grupos que existen en la ciudad actualmente y que se reúnen para que todos los miembros compartan sus experiencias para resolver un problema común.
«En mi caso nunca vi que tuviera un problema real, incluso cuando estaba acudiendo a las primeras sesiones de Alcohólicos Anónimos pensaba que todos aquellos que me rodeaban estaban un poco locos, ya que tenía compañeros que habían estado a punto de morir o bien por su propio deterioro o porque habían intentado suicidarse de lo desesperados que estaban», comenta Antonio. Desde el año 2002 no prueba el alcohol y eso es algo que «me llena de orgullo, además he descubierto una forma de vivir que desconocía donde aprendes a disfrutar de pequeñas cosas, como comer pipas en un parque con tus hijos o ir al cine con tu esposa».
Alcohólicos Anónimos cumple 71 años de su creación en España y para festejar este acontecimiento hoy se celebrará una jornada de puertas abiertas en todos los grupos existentes en el país, para que todas aquellas personas que lo deseen puedan conocer mejor esta institución y su funcionamiento.
Juan Luis conoce a la perfección cómo se desarrolla la actividad de esta comunidad notablemente útil para un buen sector de la sociedad. En ella no existen jefes, «nos turnamos en todos los cargos que puedan llegar a haber y todos somos iguales. Compartimos dolor y sufrimiento», indica Juan Luis. Los nombres no importan, sólo el problema que el alcohol puede llegar a ocasionar en la vida de determinadas personas que padecen este mal.
La bebida afecta a todo tipo de personas y es muy destacable el hecho de que «cada vez son más las mujeres que por diversos motivos deciden beber para desahogarse». Esto ha propiciado que en torno a un 25% de los afectados de Jerez o sus inmediaciones sean mujeres, que normalmente «se esconden en la soledad de su casa para beber».
Sea cual sea la causa, Alcohólicos Anónimos siempre tiene sus puertas abiertas de par en par y un teléfono (606 210 001) donde siempre, 24 horas al día, hay alguien al otro lado intentando que «situaciones como las que nosotros hemos vivido no vuelvan a ocurrir en más hogares porque éstas hacen insostenible la vida de cualquier persona. Dejar el alcohol es volver a vivir, comenzar a descubrir las cosas buenas y los problemas reales de la vida».