Nuevas imágenes desmienten la versión de los marines sobre la matanza en Haditha
La fotos demuestran que la víctimas recibieron disparos a quemarropa
Actualizado:La cadena norteamericana CNN ha tenido acceso a unas imágenes tomadas por miembros del Ejército estadounidense que, según el Pentágono, son las pruebas más incriminatorias contra los marines acusados de la muerte de 19 civiles iraquíes en la ciudad de Haditha que tuvo lugar el pasado noviembre.
Las 30 fotografías fueron tomadas por los soldados que llegaron después del suceso y ayudaron a despejar la zona. La emisora televisiva ha tenido acceso a las imágenes que, según el Departamento de Defensa, demuestran que las víctimas recibieron varios disparos a corta distancia y no fallecieron a causa ni de la metralla ni de balas perdidas, según afirmaban los atacantes.
Varios oficiales del Pentágono han afirmado que dicha prueba incrimina a los marines, que supuestamente iniciaron una masacre sin mediar provocación alguna, tras la muerte de su compañero, el cabo Miguel Terrazas, después de que estallase una bomba en la ciudad de Haditha, cerca del río Éufrates, en el noroeste del país árabe.
En las imágenes se muestran 24 cuerpos sin vida, cada uno de ellos marcado con números rojos en la frente o en la espalda. Según un oficial anónimo del Ejército norteamericano, en algunos casos, las señales indican la localización de las heridas de bala. Las fotografías dan fe de los cuerpos sin vida de varios iraquíes, algunos de ellos mujeres y niños, con disparos en la cabeza.
El Pentágono ha asegurado que no tiene intención de publicar las imágenes, cuyo contenido ha sido considerado explícito, hasta que la investigación se haya completado.
«Gran preocupación»
El comandante de la Marina estadounidense, el general Michael Hagee, expresó ayer su «gran preocupación» por las denuncias de atrocidades presuntamente cometidas por sus soldados contra civiles, pero se negó a comentar qué es lo que han encontrado los investigadores hasta el momento.
En sus primeras declaraciones públicas acerca de denuncias de supuestas matanzas de civiles iraquíes en la población de Haditha, en noviembre pasado, y en Hamdaniya, hace dos meses, Hagee trató de asegurar que cualquier infante de Marina que haya violado estándares de conducta será procesado.
En una rueda de prensa en el Pentágono, el responsable militar se mostró «a disposición del presidente», y aseguró que no ha presentado su renuncia. Asimismo, señaló que no podía formular comentarios sobre las investigaciones, que realiza el Servicio de Investigaciones Criminales de la Armada.