Juan José Ponce cimenta su carrera con nuevos premios

El joven cineasta gaditano Juan José Ponce está llamado a cumplir el sueño de ser realizador de grandes proyectos en largometraje. El director y guionista cimenta su proyecto artístico en una amplia lista de premios que ahora ha crecido con dos galardones obtenidos en el Festival Visual' 06 de Madrid (al mejor documental) y en el certamen de Cine, Humor y Documental de Bilbao. Gracias a su último trabajo Sevilla City su-ma ya 35 distinciones en su carrera. En esta ocasión, ha tratado de «eliminar los tabúes negativos y la imagen que siempre dan los medios de comunicación» de los raperos que componen en la capital andaluza, donde «se está mo-viendo algo bastante fuerte» alrededor de esta música y de la cultura del hip hop.

La Bienal de Arte del Mediterráneo de Atenas, el Docúpolis y el In-edit de Barcelona son algunos de los festivales que han reconocido en sus documentales Incha Allah, Maldita calle y Sevilla City la calidad y la frescura. A pesar de contar con 30 galardones por los dos primeros documentales y cinco por el último, asegura que los medios de los que dispone «no son suficientes», aunque, afirma, «no me gusta quejarme». «Tenemos un presupuesto de 6.000 euros nada más, pero está bastante bien, estoy muy contento con el resultado», subrayó.

Esto es posible porque cuenta con «un equipo humano muy profesional, con muy buen gusto ar-tístico y un buen ambiente de trabajo». Y es que, a su juicio, «a ve-ces se peca de un estilo cinematográfico muy basto y duro» en el género documental con una «fotografía poco trabajada». Atributos que a Ponce no le faltan, según las críticas que ha recibido de Sevilla City. «Hablan muy bien, dicen que tiene una factura muy cinematográfica y una buena fotografía».

Otro de los aspectos singulares de su estilo es que no intenta ocultar su propia mirada y se declara «en contra de que los documentales tengan que ser objetivos», por lo que no duda en pretender «romper los tabúes» sobre el hip hop y, en particular, de algunos de sus grupos más representativos y respetados: SFDK, Tote King, Juaninacka y Dogma Crew. «Son músicos como los demás y su música es tan respetable como cualquier otra», indica Ponce. Su intención sólo es esa, representarlos como «gente normal que tiene inquietudes», más allá de los estereotipos -«de los que están hartos»- sobre la vestimenta que llevan, sus andares o el habla que utilizan. Y más allá de entrar en complicaciones sobre el origen del rap y el hip hop, que, a su entender, «aburriría más al espectador».

Confiesa que era un «neófito» en esta música, a la que llegó por casualidad -vive en Sevilla- al co-nocer a El Puto Largo, de Dogma Crew, y a través de él a Acción Sánchez, de SFDK, y a Tote King, que les dejaron sus discos y entendió que en ellos había un elemento común sobre esta ola musical sevillana de la que podría salir su nuevo documental. Ponce se siente «sorprendido» por la acogida de Sevilla City porque «no es un tema social que toque el corazón». Según le cuentan, es «por el punto de vista», por esa intención de tratarlos como gente de a pie. Una temática alejada de la que retrata en Incha Allah y Maldita calle, que son una radiografía de la realidad de Marruecos, donde vivió durante años por motivos de trabajo y donde le picó el gusanillo del arte. Había estudiado Ciencias Náuticas en la Universidad de Cádiz, aunque desde siempre era «amante del cine».

Suevia Films producirá su próximo filme, que «seguramente tratará sobre la recuperación de la memoria histórica de aquellos años fatídicos» de la Guerra Civil y, en concreto, de la entrada en Sevilla del general Queipo de Llano -«un tipo curioso»-.

Al tiempo, compagina su afición con la publicidad para televisión, «que es lo que realmente me da de comer; muy pocos pueden vivir del cine».