El alcázar de Castellar abre sus puertas este año convertido en un hotel histórico de 7 habitaciones
Diputación promueve un concurso de ideas para la decoración de la fortaleza que pondrá fin a cuatro años de rehabilitación Las administraciones han invertido dos millones de euros en la recuperación del edificio, levantado entre los siglos XIII y XIV
Actualizado:Por el Castellar viejo parece que no ha pasado el tiempo. El recinto amurallado que intuyeron íberos, romanos y visigodos, y que levantaron los musulmanes entre los siglos XIII y XIV, conserva hoy su damero laberíntico de estrechas calles blancas, su caserío de tejas árabes, y amplias balconadas abiertas al embalse de Guadarranque, a Los Alcornocales y al Estrecho de Gibraltar. También se mantiene firme su casi inconquistable alcázar. Ha vigilado la zona durante setecientos años y, antes de que finalice 2006, abrirá sus puertas al turismo convertido en un hotel histórico de siete grandes habitaciones, único en Andalucía.
La Diputación, el Ayuntamiento de Castellar (PSOE) y la Junta de Andalucía, con el respaldo de fondos europeos, ultiman el proceso de rehabilitación del edificio tras cuatro años de trabajo, en los que la adaptación a las exigencias de Cultura -el recinto es Bien de Interés Cultural- y la falta de presupuesto han demorado las obras.
Francisco Menacho, consejero de la red de hoteles de Diputación (Tugasa) y portavoz del grupo socialista en la institución, visitó ayer Castellar para preparar un concurso de ideas sobre la decoración de las estancias del Hotel Alcázar. Una vez se han adecuado pasillos, escaleras, habitaciones y terrazas, el objetivo de la institución es «conseguir que el interior del alojamiento sea algo muy especial, con habitaciones temáticas y diferenciadas, que realmente tengan un valor añadido acorde con el entorno privilegiado en el que se encuentran».
La mano de Peridis
El Consistorio trabaja en la creación de un jardín junto a las almenaras y una piscina, que complementarán al proyecto desarrollado por el arquitecto y caricaturista Jose María Pérez González, Peridis. La rehabilitación del castillo y su conversión en alojamiento requerirá una inversión cercana a los dos millones de euros, según los datos aportados por Tugasa.
El inmueble dispondrá de una recepción, una pequeña cafetería, salones y siete grandes suites, algunas de las cuales tienen dos habitaciones en su interior. En total, se habilitarán 22 plazas. «Todavía habrá que ver en qué categoría lo encuadra Turismo. En principio, por las características especiales del edificio, pensamos en un tres estrellas. Aunque por sus cualidades, los equipamientos, la decoración, los servicios y el emplazamiento, estamos hablando de un hotel de la más alta categoría», explicó Menacho.
Tras su apertura, el alojamiento se integrará en la red de Tugasa, de la que ya forman parte diez negocios en otros tantos pueblos gaditanos. El Hotel Alcázar se unirá al conjunto de casas rurales que se ubican dentro del recinto amurallado para hacer del viejo Castellar uno de los complejos rurales más singulares y encantadores de todo el país.