Nuevas movilizaciones en la Base ante la «ridícula» contraoferta norteamericana

Tras casi un año solicitando una respuesta por parte de las autoridades norteamericanas para negociar el convenio colectivo, los trabajadores de la Base Naval recibieron el pasado viernes la ansiada contraoferta del Gobierno estadounidense.

Unas propuestas de cambio que el Comité del personal laboral local del recinto militar considera «ridículas». «Después de tanto tiempo pidiéndoles que modifiquen aspectos esenciales del convenio, lo único que nos proponen son diferencias insustanciales que nada tienen que ver con lo que siempre hemos reivindicado: nuestros derechos como trabajadores» explicó ayer Miguel Ángel García, portavoz de UGT de la plantilla del recinto militar.

Por ello, más de 200 trabajadores de la Base Naval volvieron a manifestarse, tal y como lo hicieron el miércoles de la semana pasada, en la puerta del control. «Nos vemos obligados a continuar con las protestas porque con la contrapropuesta americana seguimos sin poder negociar nada que tenga relación con vacaciones, jornada, salarios...», comentó José Sabido, presidente del Comité de Personal de la Base.

La concentración de ayer, que cortó el tráfico algo más de dos horas, se saldó con un incidente. Un soldado estadounidense trató de disolver con su vehículo la barrera humana de empleados con la intención de adentrarse en el recinto militar. Los efectivos de la policía redujeron al individuo impidiéndole que consiguiera su objetivo. «Ha tratado de atropellarnos, por lo que emprenderemos las acciones legales oportunas» explicó García.

Visita del almirante

Ante el citado percance, el almirante de la Base, Ricardo Gómez Enrique, se desplazó a las puertas del recinto para interesarse por lo ocurrido, así como por las reivindicaciones de los empleados.

Finalmente, los trabajadores anunciaron que estas manifestaciones de protesta se repetirán hasta que consigan sus objetivos. «No tenemos un calendario fijado pero seguiremos protestando», concluyó García.