La venta de Argüeso se podría concretar en breve

El futuro de la bodega sanluqueña Herederos de Argüeso podría dilucidarse en breve si, como apuntaban ayer fuentes sindicales, la dirección de esta empresa acepta alguna de las dos ofertas que hay sobre la mesa y que están promovidas por sendas inmobiliarias de la localidad.

Según apuntaban ayer estas fuentes de los trabajadores, «en el plazo de unas 48 horas podría concretarse la venta de la bodega, ya que las conversaciones están muy avanzadas», al tiempo que transmitieron su deseo de que «se nos informe lo antes posible sobre el futuro que podrá tener el negocio bodeguero tras la operación».

En principio, la oferta de estas dos inmobiliarias propiedad de «empresarios de la zona con una trayectoria honrada y que nunca han tenido problemas laborales en sus compañías», no causa demasiada intranquilidad a la plantilla, ya que ambas «han dejado muy clara su intención de seguir adelante con la bodega».

En este sentido, los representantes de los trabajadores hicieron hincapié en que «cualquier acuerdo al que se llegue para la venta de la bodega debe tener en cuenta el futuro de la plantilla, porque no hay empresa sin trabajadores ni trabajadores sin empresa». Según estas fuentes, las negociaciones que se están llevando a cabo para poner fin a esta larga operación de venta «incluye una cláusula en la que se obliga a los propietarios a negociar con los trabajadores».

Estas inmobiliarias, una de las cuales podría ser la nueva propietaria de Argüeso, ya han mantenido contactos con algunos miembros de la plantilla para conocer los detalles del negocio bodeguero y su posible traslado sin que haya perjuicio para los activos. Y es que a nadie se le escapa que el principal interés de las dos inmobiliarias son los 27.000 metros cuadrados que ocupa esta bodega en pleno centro de Sanlúcar. Una opción que no asusta a la plantilla, que considera que «con lo que se puede sacar de ese suelo habrá beneficios de sobra para poder mantener la bodega y reflotarla en la zona de Chipiona».

En cuanto a la demanda que interpuso uno de los socios, Javier Laínez, para evitar la venta a Morales, podría retirarse si la compra una de estas inmobiliarias, ya que «hay buenas relaciones con ellas».