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Escándalo en Alemania por el espionaje a periodistas de los servicios secretos

El informe de un ex juez del Supremo desvela que varios informadores colaboraron en la vigilancia a sus colegas

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Según la ley, el Servicio de Información Federal (BND), más conocido como la CIA alemana, tiene como misión recoger información más allá de las fronteras germanas. Pero desde ayer, el famoso BND se encuentra en el ojo del huracán a causa de un informe realizado por un ex juez del Tribunal Supremo donde se revela que los espías alemanes vigilaron durante años, y a gran escala, a un selecto grupo de periodistas germanos con el objetivo de desenmascarar a un informante dentro de sus propias filas.

El informe elaborado por el juez Gerhard Schäfer y que fue entregado a la Comisión de Control parlamentario, desvela también que el BND compró los servicios de cinco periodistas para que espiaran a sus compañeros. Uno de ellos, un ex redactor de la revista Focus recibió la suma de 600.000 euros por su trabajo. Según el documento, los periodistas espías, fueron reclutados por el BND y algunos se ofrecieron voluntariamente para el trabajo.

Los más observados

La existencia del informe fue revelado ayer por Süddeutsche Zeitung, uno de los periódicos que fue sometido a la vigilancia del BND. Los medios más observados por el espionaje alemán fueron la revista Der Spiegel, Stern y Focus, así como el rotativo regional Sudwest Presse.

Las revelaciones del periódico de Múnich ha desatado una ola de protesta en el medio periodístico germano y ha obligado al Gobierno federal a tomar cartas en el asunto. Durante una rueda de prensa rutinaria, el portavoz oficial Thomas Steg condenó el operativo y se solidarizo públicamente con el gremio. «El Ejecutivo alemán está determinado a defender la libertad de prensa, un derecho fundamental», dijo el representante gubernamental.

El informe del ex juez abarca más de 170 páginas y está basado en una serie de entrevistas que realizó con ocho altos cargos del BND. En el dosier, que fue realizado por encargo de la Comisión de Control parlamentario, el magistrado llegó a la conclusión de que el Servicio de Información actuó ilegalmente y que violó masivamente la libertad de prensa.

Medidas de castigo

Varios políticos de oposición calificaron el contenido del informe como un «gran escándalo» y exigieron al Gobierno que iniciara las medidas pertinentes para castigar a los culpables. La Asociación de Periodistas alemanes, por su parte, pidió que se hiciera público el documento y también califico como una desvergüenza la colaboración de colegas con el BND. «Los periodistas tienen una tarea y una responsabilidad especial en este país. Nuestra misión es observar con ojos críticos los órganos del Estado y no estar al servicio de ellos para ganar dinero extra», dijo el presidente de la organización, Michael Konken.