Quince heridos y trece detenidos, balance de la sexta jornada de huelga del Metal en Vigo

Quince personas han resultado con heridas, entre trabajadores y policías, tras los disturbios acaecidos este mediodía en relación con la huelga del sector del metal en Vigo, en una jornada en que han sido detenidas trece personas.

La huelga de los trabajadores del metal, que hoy han vuelto a manifestarse por las calles de Vigo, creó este mediodía duros enfrentamientos de los manifestantes con la Policía, que cargó en varias ocasiones, en una jornada en la que han sido quemados o volcados decenas de contenedores en la ciudad. Fuentes de la Subdelegación del Gobierno confirmaron que han sido 13 los detenidos en relación con los disturbios, mientras resultaron lesionados varios policías.

Por su parte, fuentes hospitalarias informaron de que han llegado a atender a 15 personas, una de ellas con lesiones serias, al sufrir un traumatismo ocular. Once de los lesionados han sido dados ya de alta. Fuentes sindicales indicaron que uno de los heridos recibió un gran golpe en la cabeza, otro fue arrollado por un coche policial, otro tiene un brazo roto y varios de ellos padecen diversas lesiones. La Subdelegación del Gobierno informó de que un total de 18 furgones policiales presentan diferentes destrozos.

Tras los incidentes de esta mañana, los representantes sindicales de CCOO, UGT y CIG advirtieron en rueda de prensa de que no habrá negociaciones con la patronal hasta que los detenidos sean puestos en libertad. José Antonio Alvarez, representante de UGT, afirmó que asistieron a la reunión que tenían previsto con la patronal antes de los incidentes por "cortesía". Pero, agregó, no se encuentran "ni moral ni psíquicamente con ganas" de mantener las conversaciones tras una actuación "tremendamente desmesurada".

Miles de trabajadores salieron este mediodía en manifestación, en el sexto día de huelga para reclamar un convenio justo, hasta la estación de tren de esta ciudad, cuando se produjo una carga en la que los agentes emplearon porras. Fuentes de la Subdelegación del Gobierno apuntaron que ha sido una respuesta para defenderse de los ataques de los huelguistas. Según esta versión, los manifestantes intentaron romper un cordón policial, momento en que respondieron los agentes.