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DESFILE MILITAR. Autoridades durante el acto de toma de posesión. / CHEMA BARROSO
ESPAÑA

Las reformas en la Guardia Civil no alterarán su carácter militar

El Ejecutivo prepara un nuevo régimen disciplinario para que los agentes no estén sometidos a la jurisdicción castrense

C. CALVAR/COLPISA. MADRID
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El Gobierno se comprometió ayer a impulsar reformas en la Guardia Civil para mejorar la calidad de vida de sus agentes y eximirles de cumplir el régimen disciplinario militar, que castiga hasta con penas de prisión a quienes cometen simples faltas en el desempeño de su trabajo. Los ministros de Interior y Defensa, Alfredo Pérez Rubalcaba y José Antonio Alonso, prometieron mejorar la eficacia del instituto armado y reforzar su presencia en España y Europa, pero sin alterar su naturaleza militar.

Los titulares de Interior y Defensa defendieron la utilidad del carácter militar de la Guardia Civil en los discursos que pronunciaron en la toma de posesión de su nuevo director general, el mallorquín Joan Mesquida.

En su intervención, Rubalcaba aseguró que el nombramiento de Mesquida imprime «continuidad» al trabajo de su antecesor en el cargo, el general del Ejército del Aire Carlos Gómez Arruche, y supone una «oportunidad» para intensificar la «renovación» del instituto armado. Entre esos cambios, el ministro de Interior destacó la necesidad de «adecuar cabalmente sus normas internas a la Constitución, manteniendo su carácter militar».

Por su parte, el ministro de Defensa -departamento al que está adscrita la Guardia Civil, aunque su trabajo depende de Interior por ser policial- aseguró que el cuerpo «va a seguir ocupando la misma posición institucional». No obstante, Alonso explicó que el Ejecutivo prepara una reforma de su régimen disciplinario ajeno a la jurisdicción militar «para adecuarlo a las funciones policiales que desempeña», y trabaja en la redacción de un Estatuto de Derechos y Deberes de los agentes.

Mejoras salariales

Ambos ministros anunciaron que el Gobierno destinará más recursos a mejorar los salarios de los guardias -«porque se lo merecen y porque así trabajarán más motivados», resaltó Alonso, y a renovar las casas-cuartel. En el plano operativo, Rubalcaba ofreció reforzar las plantillas, potenciar los recursos de los servicios de información y dotar a las unidades de las últimas tecnologías para hacer frente a las nuevas amenazas.

El ministro del Interior resaltó, además, la colaboración de la Policía y de la Guardia Civil en la lucha «para poner fin a la violencia terrorista» y homenajeó a todos sus agentes asesinados por ETA. Rubalcaba afirmó que el final del terrorismo «tardará y será difícil, pero llegará».

Del nuevo director general de la Guardia Civil, Rubalcaba y Alonso destacaron sus «cualidades» para dirigir la institución. De Gómez Arruche evocó su «lealtad», «eficiencia» y «capacidad de trabajo».