«He parado las conversaciones sobre la venta de mi colección»
El pulso que sostiene la baronesa con el Ayuntamiento de Madrid por el Plan de remodelación del eje Prado-Recoletos amenaza el patrimonio pictórico español
Actualizado:Lleva ya tres años batallando con el proyecto del eje Prado-Recoletos. Ya en 2004 declaraba que si no se modificaba, no le gustaría dejar su colección en el museo. Y piensa seguir dando guerra hasta julio, cuando está previsto la aprobación del Plan. Una próxima reunión (la quinta) con Gallardón, e incluso atarse a un árbol. El 6 de mayo acudirá a una concentración. Está dispuesta a todo. Este asunto, dice, no le deja dormir a gusto. Dolida y defraudada. Así se muestra Carmen Thyssen.
-Manuel Cobo, vicealcalde de Ma-drid, dice que hay falta de comunicación en el Patronato del museo y que el proyecto del eje Prado-Recoletos fue aceptado por unanimidad por dicho Patronato.
-Eso no es verdad. He comprobado con la Fundación que jamás hemos aprobado una oferta.
-En el proyecto sí se ganan varios metros de acera.
-Pero eso no es sustancial para el museo. La única solución es que el tráfico esté en el medio, con túnel o sin él, eliminando el tráfico de las dos aceras y dejar los árboles. Y que haya sólo una vía de carga y descarga. Y lo mismo en la acera de enfrente, junto al Prado.
-También ha liderado una lucha ecológica contra la tala de árboles.
-Dicen que van a reponerlos. Los árboles trasplantados van a medir un metro y medio como máximo y tardarán 30 ó 40 años para estar como ahora. Hay un platanero que tiene 200 años. La intención es dejarlo como un desierto.
-¿Mantiene su intención de atarse a un árbol? No la imagino. Sabe que esa foto vale su precio en oro...
-Lo mantengo. El 6 de mayo habrá una concentración al mediodía frente al Museo Thyssen, a la que iré yo, junto a varios miembros del Patronato. Convocan «SOS. Árboles de Madrid», jardineros municipales de Comisiones Obreras, y las organizaciones Trepa y Ecologistas en Acción. Dicen que el Ayuntamiento pretende talar 700 árboles de gran porte. También denuncian que se va a despilfarrar más de 500 millones de euros y destruir una zona declarada bien de interés cultural. De Paseo del Arte no va a quedar nada. Va a ser un paseo desértico y nada artístico. A ello unimos la polución que van a tener que soportar los cuadros. En el museo hay cuadros que tienen más de 500 años, pero de esta forma van a durar poquísimo.
-¿Cuántas veces se ha reunido con Ruiz Gallardón?
-Hemos tenido cuatro reuniones.
-¿Y lo ve con predisposición para modificar el Plan?
-Espero que escuche a sus ciudadanos. Es sensible, muy inteligente y un gran alcalde. Supongo que se replanteará el proyecto.
-Hace dos años usted ya dijo: «Si no se modifica el eje Prado-Recoletos, no me gustaría dejar mi colección en el museo». ¿Lo mantiene?
-Sí. He parado cualquier conversación acerca de mi colección.
-¿No puede entenderse como un chantaje o una amenaza?
-De mi colección no quiero ni hablar. Me siento defraudada. No se pone una autopista delante de un museo.
-Ya mantuvo un encuentro con la ministra para comenzar la negociación de la venta de su colección.
-Sí. Pero he parado todas las conversaciones sobre la venta de mi colección.
-En caso, esperemos que no, de que se llevase de España su colección. ¿Cómo se llenaría la ampliación del museo, hecha a medida de ella?
-Se han llenado tres museos.
-El Prado y el Reina Sofía tienen fondos para llenar de sobra las ampliaciones, pero el Thyssen no.
-Sería un poco complicado, sí.
-Si no se hiciese ninguna modificación en el Plan, ¿se pensaría seriamente llevarse su colección?
-Totalmente en serio.
-Aunque las negociaciones se hayan bloqueado, algunas valoraciones de su colección hablan de entre 400 y 600 millones de euros. ¿Es así?
-Ni idea. Yo sé lo que pago de seguros. No puedo hablar nada de la colección.
-¿Cree que se ha olvidado que el Thyssen también existe?
-Sí. Con la cantidad de turistas que recibe el museo y el dinero que representa para España, no entiendo cómo lo pueden tratar tan mal. Internacionalmente es tan conocido como el Prado.
-¿Se siente maltratada?
-Me siento muy triste por mi marido y por haber traído aquí su colección. Si llego a saber lo que va a ocurrir no le traigo a España.
-¿Se arrepiente en serio de que la colección del barón esté expuesta en España?
-Sí, lo digo en serio. Estoy triste y dolida por él y su padre. Ha llevado muchos años y mucho sacrificio esta colección para que acabe en una autopista. No entiendo cómo no se valora. No se puede tratar tan mal a una persona que se hizo muy español gracias al cariño de los ciudadanos. El Ayuntamiento de Madrid está maltratando al barón Thyssen, a su colección y al museo, que va a quedar muy mal internacionalmente.
-¿El Patronato la respalda?
-Siempre. Incluso me apoya Miguel Zugaza, director del Prado.
-¿Tráfico y árboles son dos puntos innegociables?
-Sí, totalmente.
-¿Se plantea, incluso, recurrir al presidente del Gobierno?
-Me gustaría, claro.
-¿Se solucionó el problema del registro de las marcas?
-Todavía no. Parece mentira.