¿Mitin del partido o del Gobierno?
Actualizado:En el reino de lo imaginario, existen dos países llamados, respectivamente, Sincerio y Falsio, que algunos prefieren llamar naciones y las identifican con los nombres de Veracia y Embustia. Sus respectivos habitantes tienen distintas actitudes con respecto a la verdad: los de Sincerio nunca mienten; los de Falsio jamás dicen la verdad. Sabiendo esas características de unos y otros, un vagabundo extraviado quiso saber si estaba en Sincerio o en Falsio, Veracia o Embustia. Se acercó al solitario morador de una cabaña y le hizo una pregunta. De la respuesta coligió dónde se hallaba y enderezó su senda. ¿Cómo lo consiguió? Simplemente preguntó: «¿Es usted natural de este país?» Sabía que si se encontraba en Sincerio la respuesta de un veraz no podía ser otra que «sí» y la de un embustero igualmente «sí». En cambio, si se hallaba en Falsio ocurriría todo lo contrario. En cualquier caso, una respuesta afirmativa quería decir que se encontraba en Sincerio y una negativa que estaba en Falsio. Si el vagabundo de la historia hubiera visto ayer en la televisión las imágenes del mitin que celebró el PSOE en la plaza de toros de Vista Alegre de Madrid habría tenido que hacer más de una pregunta para saber en qué país se encontraba.
Hace bien el PSOE en recordar sus logros en el paso del ecuador de la legislatura, auque sea discutible si el «formato mitin de partido» es adecuado al contenido «mensaje del Gobierno». Spengler nos advirtió de que «hay una técnica de construir barcos y otra de hacerlos navegar; igual que hay una técnica de fabricar violines y otra de hacerlos sonar». Y añadía: «Conviene no olvidar la diferencia». Porque mientras Maragall aseguraba en Pedralbes que el Estatuto de Cataluña es un pacto entre las soberanías catalana y española, Zapatero decía que es un impulso a la descentralización y que refuerza la cohesión. La mitad de los vagabundos pueden creer que están en Jauja o en Arcadia Feliz y la otra mitad en Sodoma o Gomorra.