Un diluvio anega el Pizjuán y obliga a aplazar el duelo Sevilla-Barça

Una tremenda tormenta sobre el Sánchez Pizjuan obligó a Teixeira Vitienes a aplazar el partido entre el Sevilla y el Barcelona que debía disputarse ayer. El árbitro cántabro tomó esta decisión pasados algunos minutos de las diez de la noche, al comprobar que una banda del terreno de juego estaba anegada.

Poco antes de las 20.00 horas, la lluvia empezó a caer con insistencia sobre el estadio andaluz. Una espesa capa de agua acompañada en muchas fases por una espectacular granizada que dejó impracticable el césped e inundó muchas zonas del Sánchez Pizjuan.

Pese a que los medios de comunicación ya tenían las alineaciones de los equipos, ya era evidente que el partido se iba a suspender. No obstante, el colegiado visitó el césped del estadio en repetidas ocasiones y, aunque el drenaje funcionó a la perfección, un lateral estaba completamente encharcado. Por eso, Teixeira Vitienes acabó aplazando el partido, con la complicidad de los presidentes de ambos equipos.

La suspensión traerá cola por culpa de las premuras del calendario y la participación de ambos equipos en competiciones europeas. A bote pronto, la cancelación del partido se antojaba positiva para ambos conjuntos. El cuadro andaluz se juega su pase a la final de la Copa de la UEFA, el próximo jueves, ante el Schalke, mientras que el Barcelona se medirá ante el Milan, el miércoles, con una plaza para la final de la Liga de Campeones en juego.

Esos dos compromisos complican la disputa del partido en las próximas fechas. Si el Sevilla y el Barça se clasifican para sus respectivas finales no hay un hueco libre razonable para disputar el choque. El único miércoles disponible del mes de mayo antes del final de la Liga (14 de mayo) sería la final de la UEFA (10 de mayo), ya que el próximo miércoles 3 de mayo se disputa una jornada de Liga entre semana. La final de la 'Champions' no se tiene en cuenta porque se disputará el 17 de mayo.



Según este calendario, la única solución, pésima para el Sevilla, sería que los andaluces quedaran eliminados de la UEFA y el partido se jugase la semana del 10 de mayo. La decisión deberá tomarla el Comité de Competición de la FEF, que se reúne el mañana.

Título en espera

La lluvia impidió que el Barça dependa de sus propios resultados para conquistar el título y celebrarlo con sus aficionados el próximo sábado ante el Cádiz. No obstante, si los azulgrana sumasen una victoria ante el cuadro andaluz podrían adjudicarse el título de Liga si el Valencia tropieza el domingo en su propio feudo ante el Alavés.