Las autoridades rumanas deciden evacuar a 10.000 personas ante la crecida del Danubio
Los especialistas estiman que la situación se mantendrá todavía crítica en el sur del país balcánico durante al menos otras dos semanas más
Actualizado: GuardarUnas 10.000 personas serán evacuadas en las próximas horas de varias localidades ribereñas en el Danubio tras romperse hoy dos diques por la presión de las aguas del río, que registra las mayores cotas de los últimos once años. Los diques a la altura de las localidades Bistret y Dabuleni han cedido esta mañana y las aguas avanzan rápidamente amenazando unas seis localidades río abajo, lo que ha hecho necesaria la evacuación de unas 9.000 personas. Asimismo, la ruptura de otro dique, entre Dabuleni y Calarasi, ha causado la evacuación urgente de unos 400 habitantes del pueblo de Sarata.
El presidente rumano, Traian Basescu, ha visitado hoy la región de Bisret y ha instado a que la gente obedezca las órdenes y abandone inmediatamente sus casas. Basescu ha asegurado que varios vehículos militares están preparados para llevar a la gente, sus bienes y también sus animales a lugares seguros. "Se pasa a la evacuación inmediata, no importa en qué condiciones", ha ordenado Basescu a la prensa, aunque ha precisado que la operación es urgente dado que el agua está dos metros por encima del nivel de estas localidades. Conforme con los datos publicados esta mañana por el Ministerio de Administración e Interior, hasta el 24 de abril por la mañana en el sur de Rumanía han sido evacuadas 5.570 personas. Las aguas han afectado a 147 localidades de 12 distritos situados a lo largo del Danubio. Aproximadamente 1.000 casas han quedado inundadas, de ellas 227 han sido totalmente destruidas y 122 están en peligro de derrumbarse, mientras que casi 3.700 construcciones anejas de las fincas están bajo las aguas.
Unos 500 kilómetros de carreteras nacionales y regionales y decenas de miles de hectáreas de terrenos agrícolas, bosques y pastos permanecen anegados, y cerca de 145 puentes han sido destruidos por las aguas. Más de 21.000 hectáreas han sido inundadas de modo controlado para salvar localidades pobladas e importantes objetivos económicos. Miles de militares, gendarmes, bomberos y voluntarios actúan con utillajes de construcciones a lo largo de los 1.075 kilómetros del tramo rumano de Danubio para consolidar los diques. Las lluvias de los últimos días han determinado un nuevo crecimiento del caudal del río. El Gobierno, la Iglesia Ortodoxa y la Cruz Roja ayudan a los habitantes de la zona siniestrada que atraviesan momentos de pánico y revuelta y numerosos de ellos no quieren abandonar sus casas. Muchas de las personas que fueron evacuadas la semana pasada han regresado a sus casas, todavía bajo las aguas, con el intento de salvar algo de sus bienes. Los especialistas estiman que la situación se mantendrá todavía crítica en el sur de Rumanía durante al menos dos semanas.