El SIP exige a Seguridad un plazo para la llegada nuevos coches a la Policía Local

Los responsables del Sindicato Independiente de la Policía Local (SIP) no se fían del delegado de Seguridad y Movilidad, Raúl Ramírez, y no están dispuestos a renunciar a las movilizaciones anunciada en la próxima Feria del Caballo hasta recibir pruebas de la incorporación de los ocho nuevos vehículos policiales.

El responsable provincial del sindicato, Juan Manuel Crespo, se pregunta si Ramírez «miente o es un incompetente», porque «llevamos dos años reclamando la renovación de la flota y espera a que podamos manifestarnos para actuar». Pero, en cualquier caso, asegura que esos nuevos vehículos anunciados «corresponden a los presupuestos municipales de 2005 y ya deberían estar aquí».

Para los representantes sindicales, las dificultades económicas no suponen un argumento válido para justificar las deficiencias técnicas que presenta la Policía Local. Crespo se pregunta «en qué se está gastando el presupuesto» destinado cada año al cuerpo, e insiste en que «la falta de presupuesto no debe afectar a la seguridad de los ciudadanos».

Ironizó, en este sentido, proponiendo que los fondos para la instalación de cámaras en la Feria se empleen para la adquisición de los vehículos, y criticó que en la Delegación de Medio Ambiente se hayan adquirido este año sin problemas furgones para el traslado de técnicos y operarios.

El verdadero problema, según el SIP, es que «ninguna empresa quiere contratar un renting con la Delegación» por los problemas que pone el Ayuntamiento a la hora de pagar. De hecho, Crespo afirma que «ya ocurrió que una empresa retiró cuatro vehículos obtenidos mediante este sistema por impago».

De todas formas, para el sindicato resulta insuficiente la incorporación de «sólo ocho nuevos vehículos». Aún así, para descartar las movilizaciones en la Policía Local Crespo dejó claro que «queremos ver el renting hecho y un escrito garantizando la fecha en que vendrán los coches».

El SIP espera que la alcaldesa, Pilar Sánchez, «tome cartas en el asunto» y medie en el conflicto. Aunque parece que la primera edil no está por la labor. Ayer mismo, en su visita al recinto ferial para comprobar cómo avanza el montaje de las casetas y el alumbrado, Sánchez dejó este asunto en manos del delegado de Seguridad. Insistió en que se trata de un problema «de competencia» de Ramírez, en cuyo «talante» y capacidad negociadora confía para que se reúna con los representantes sindicales y resuelva el conflicto.