La provincia vive con intensidad su primera jornada de pasión

Por fín llegó el día. Domingo de Ramos, 9 de abril, y decenas de miles de gaditanos en las calles de sus respectivas ciudades para contemplar los desfiles procesionales de la tradicional Borriquita.

Así, con puntualidad británica, los pasos tomaban las calles de municipios como El Puerto de Santa María, Chiclana o Puerto Real, que se llenaban de pasión y fervor religioso en una Semana Santa que llega con un tiempo respetuoso con los cargadores y cofradías, y que augura momentos de máximo apogeo en días venideros.

EL PUERTO DE SANTA MARÍA

Iglesia de San Carmen y San Marcos

Ambiente de gala

Puntual, a las cuatro de la tarde apareció la Cruz de Guía de la Borriquita por la puerta de la iglesia de El Carmen, donde los penitentes vestían con túnica blanca y capa celeste. Al ritmo del Himno Nacional primero y de la Palma de San Marcos después, salió el primero de los pasos bajo un sol de justicia, lo que no impidió que la gente se agolpara en la calle Aurora para ver la primera de las procesiones que da inicio a la Semana Santa. Entre los penitentes se apreciaron pocas palmas, tradicionales en esta procesión, y muchos cirios. A la salida de la Virgen, la banda tocó Coronación, haciendo las delicias de los fieles allí presentes, que trataban de inmortalizar el momento. A las seis y media pasó frente a la Iglesia Mayor Prioral, en la plaza de España, donde esperaba una gran multitud. Pasadas las doce de la noche se recogió el último paso. La hermandad del Santísimo Cristo de la Flagelación y María Santísima de la Amargura salió de la iglesia de San Joaquín a las seis de la tarde. Manuel Ganaza Garrucha, capataz, mandaba a la cuadrilla del Cristo que realizó una salida perfecta. «Es fácil cuando llevas trabajando cuatro años con el mismo grupo».A la Virgen la sacaron acto seguido de rodillas para levantarla al son de los acordes del himno nacional, mientras sus feligreses aplaudían emocionados. Rozando las diez de la noche apareció la Cruz de Guía por la Plaza España y cerca de la una de la madrugada se recogía en su templo.

CHICLANA

La Borriquita

Pendientes del tiempo

La cofradía lasaliana de Jesucristo Rey en su triunfal entrada en Jerusalén y María Santísima de la Estrella, más conocida como la Borriquita, puso ayer el punto de partida a la Semana Santa chiclanera de 2006. A pesar de que el día despertó con unas nubes amenazantes de lluvia que se hicieron más intensas durante el desfile procesional, no llegó a caer agua por las calles del centro del municipio y a las cinco de la tarde, la cruz de guía hacía acto de presencia en la calle Agustín Blázquez, donde centenares de chiclaneros esperaban la salida de los pequeños nazarenos que flanqueaban al paso de misterio desde la capilla del colegio La Salle.

Tras encarar la primera parte de la cuesta dirección a la calle Bailén tuvo su primera dificultad en la gran bajada que tiene la calle Fierro hacia la plaza de España. Siempre acompañados por un pueblo entregado, que vistió sus mejores galas para dar la bienvenida a la semana de pasión, el Señor y María Santísima de la Estrella recorrieron las principales arterias céntricas de la ciudad, tales como La Fuente, Vega o Alameda del Río, antes de entrar en la carrera oficial, que como cada año transcurre por la calle La Plaza. Fue allí donde la banda municipal del maestro Enrique Montero deparó un repertorio de marchas procesionales que entusiasmaron a quienes volvieron a llenar esta zona, que como novedad ha visto como el aumento de las sillas puesta por la delegación de Fiestas ha hecho más cómoda la tarde a quienes se acercaron hasta ese lugar. Otro de los puntos álgidos de la procesión fue el paso por la Plaza de Jesús Nazareno donde, con una alameda abarrotada de adeptos, antes de encarar la cuesta de Hormaza como paso previo a recogerse en su templo, ambos pasos realizaron el tradicional saludo en las puertas del convento de las madres agustinas recoletas y a Nuestro Padre Jesús Nazareno.

PUERTO REAL

La Salle, protagonista

Penitencia

Con ganas empezó este año la Semana Santa de Puerto Real. Tras la masiva comparecencia de público el pasado viernes en el primer desfile de Jesús de Medinaceli por la barriada de Ciudad Jardín, los fieles a la Borriquita no quisieron ser menos y acompañaron, en multitud, a los hermanos cofrades.

Con la novedad del horario, treinta minutos más tarde que el pasado ejercicio, a las cinco y media se abrían las puertas de la capilla del Colegio La Salle se abrían para dar paso a los primeros penitentes pocos minutos antes de que el paso de Jesucristo en su Entrada Triunfal en Jerusalén iniciase su recorrido.