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Empleo lamenta que las facturas falsas se den en un sector tan apoyado como el marroquinero
La patronal de la piel dice que son «hechos aislados» y se apunta a un empresario de Villaluenga como el tercer detenido de la trama
Actualizado: GuardarLa trama de emisión y venta de facturas falsas destapada por la Agencia Tributaria generó ayer una fuerte conmoción en Ubrique por la fuerte raigambre de la industria de la marroquinería en esta localidad y provocó reacciones tanto en el ámbito privado como en el público.
El consejero de Empleo, Antonio Fernández, fue uno de los más directos y lamentó que esta práctica ilícita se haya producido «en una provincia y en un sector al que le hemos dedicado muchos esfuerzos y mucha formación para que estuviera en el ámbito de la normalidad», en relación al plan estratégico planificado para esta actividad y a las subvenciones que ha recibido en áreas como la internacionalización.
El alcalde del municipio, Javier Cabezas, que valoró la actuación judicial, también reconoció su malestar por que «el nombre de Ubrique aparezca relacionado en asuntos como éste», por lo que instó a que «no se hable tan a la ligera del pueblo ni se meta a todo el mundo en el mismo saco», en alusión tanto a la población como a las empresas marroquineras.
La trama organizada de facturas falsas se detectó dentro de la Operación Halcón desarrollada por la Inspección de Hacienda y el servicio de Vigilancia Aduanera. Como consecuencia de las pesquisas iniciadas en verano, el pasado miércoles fueron localizados quince empresarios como implicados en la estafa y se detuvo a tres personas: el ex jefe de la Policía Local de Ubrique Carlos Carretero; su secretaria, Elisa Calvente, y, al parecer, un empresario de Villaluenga del Rosario ligado al sector marroquinero. Además, fueron intervenidas cinco fincas, tres vehículos de lujo, quince cuentas corrientes y 450.000 euros en metálico hallados en cinco cajas fuertes.
El fraude consistía en la compra de falsos extractos de pagos que posteriormente eran desgravados en las declaraciones del IVA y del Impuesto de Sociedades, lo que suponen un delito de falsedad en documento mercantil y fraude fiscal.
Aunque ya han trascendido los primeros resultados de las investigaciones, la operación sigue abierta y, según apuntaron diversas fuentes cercanas al caso, las detenciones proseguirán en los próximos días porque la estafa podría alcanzar grandes dimensiones.
«Sólo un 3% del sector»
Aunque la línea investigadora apunta a la marroquinería y dado que aún se desconoce el alcance definitivo de la trama, la patronal de este sector matizó las personas imputadas «no tienen relación directa con este sector económico». Además, según aseguró el presidente de la organización peletera, Manuel Martínez Melgar, las dieciocho personas señaladas hasta el momento «no significan ni un 3% del total» de 550 asociados, por lo que apeló a que «todo el trabajo que está realizando esta industria no se vea empañado por estos hechos aislados».
En cambio, el portavoz de IU en el Ayuntamiento Manuel Ramírez sostuvo que la sorpresa ha saltado «por el volumen» defraudado, «pero no por el sector, porque se sabe que se hace día a día en mayor o menor escala», por lo que criticó el «juego a dos barajas» que predomina en esta industria.