Animados y bajo cero
'Ice Age 2: El deshielo' devuelve a las divertidas criaturas prehistóricas
Actualizado:Ice Age: La edad de hielo fue un éxito mundial hace cuatro años. Re-caudó más de 170 millones de dólares sólo en EE UU y confirmó el buen estado del cine de animación más allá de Pixar. La división de animación en 3D de la Fox vuelve a contar con un buen guión al margen del espectacular despliegue técnico con Ice Age 2: El deshielo, una inevitable secuela que retoma las tribulaciones del peludo Manfred, el último mamut sobre la Tierra; el perezoso Sid, siempre liándola; Diego, el tigre dientes de sable con pánico al agua; y Scrat, la ardilla dentuda, cruce entre Charles Chaplin y Buster Keaton, dispuesta a todo con tal de tener una bellota entre sus patas. Dirige el show para todos los públicos el brasileño Carlos Saldanha, co-director de la primera parte y de la entretenida Robots. En Ice Age 2: El deshielo, película pergeñada como su predecesora en los estudios de animación Blue Sky, la Edad de Hielo está llegando a su conclusión debido al calentamiento global del planeta. El grupo de animales protagonistas disfruta de lo lindo con la nueva situación. El hielo fundido da paso a un paraíso lleno de ventajas, pero aparece una gran amenaza: una gigantesca balsa glaciar que contiene miles de litros de agua está a punto de romperse, amenazando a todo el valle y los animales que lo habitan. La única oportunidad de so-brevivir es juntarlos a todos y emprender un largo viaje emigratorio lejos del peligro. Se inicia así una odisea plagada de piedras punzantes en el camino, en forma de depredadores, aludes de nieve y superficies heladas que se resquebrajan a su paso. Nuevos personajes se unen a los intrépidos reyes de la función: Ellie, una mamut que da esperanzas a Manfred de perpetuar su raza; Crash y Eddie, dos zarigüeyas que acompañan infatigablemente a la peluda hembra y no paran de bromear; Tony el Rápido, un armadillo de lengua suelta aficionado a embaucar a los demás y sacar provecho de las desgracias ajenas; Lone Gunslinger Vulture; un buitre carroñero que se frota las plumas ante la terrible catástrofe que se avecina porque puede significar un buen montón de cadáveres flotando; y Cretáceo y Torbellino, dos reptiles con malas pulgas de fiero aspecto que se empeñan en engullir a todo ser viviente que se les acerque.
Litros de agua digital
La clave del buen funcionamiento de la primera entrega fue la identificación del público con los divertidos protagonistas, a los que vuelven a poner la voz actores como John Leguizamo, Ray Romano y Denis Leary, reparto al que se une, con motivo de las nuevas creaciones parlanchinas Sean William Scout, Queen Latifah, Josh Peck, Will Arnett y el presentador de televisión Jay Leno, entre otros.
Técnicamente Ice Age 2: El deshielo supera a la primera parte de las aventuras de Manny, Sid, Diego y Scrat. Conseguir un excelente resultado infográfico del pelaje y la piel de los animales, y los litros de agua digital donde chapotean los personajes han sido los mayores retos de un equipo de profesionales al servicio de un ingenioso argumento repleto de entrañables momentos y diálogos chispeantes.