Olmert, el abogado a la sombra de Sharon
Desde el 4 de enero ocupa las funciones de jefe del Gobierno tras la enfermedad de Ariel Sharon
Actualizado:Con la victoria de Kadima en las elecciones israelíes, Ehud Olmert, que se convirtió en primer ministro en funciones después de que Ariel Sharon cayera en coma en enero, se ha deshecho, por fin, de la sombra de su predecesor.
Conocido por ser el delfín y mano derecha de Sharon durante la evacuación de la franja de Gaza, Olmert, concurrió a los comicios arropado por la imagen de éste. El entonces viceprimer ministro israelí asumió el pasado 4 de enero las funciones de jefe del Gobierno después de que Sharón sufriera un derrame cerebral masivo que lo mantiene en coma.
Olmert, que ocupa también la cartera de Finanzas y de Industria y Comercio, asumió en los últimos tres años las responsabilidades de gobierno cada vez que el primer ministro estaba ausente.
Nacido en Binyamina, al norte de Israel, en 1945, es un militante histórico del partido derechista Likud, aunque fue uno de los primeros en acompañar a Sharon en su última aventura política cuando creó, en noviembre, el nuevo partido "Kadima" (Adelante, en hebreo).
Favorecido, en los últimos meses, por el halo institucional de la jefatura del Gobierno, Olmert supo hacerse con el liderazgo de Kadima como el más lógico sucesor de Sharon , aunque la formación no celebró elecciones primarias y muchos le atribuyeran falta de carisma.
En los anuncios de la campaña Olmert aparecía sentado en su despacho de Jerusalén, respaldado siempre con la fotografía de su "trampolín político" Sharon colgada en la pared, o haciendo footing con el coche oficial detrás.
Recuerdo de Sharon
El su primer discurso tras el anuncio de los resultados de los sondeos a pie de urna, Olmert recordó al fundador del partido de quien dijo que había tenido "el valor, la determinación y el deseo de ver las cosas de forma diferente y de cambiar de rumbo".
Pese a que muchos le achacan una poco notoria carrera militar, hasta la fecha uno de los requisitos casi primordiales para alcanzar la Jefatura del gobierno en Israel, Olmert parece desquitarse de esa premisa. Con 23 años sirvió en las Fuerzas de Defensa de Israel como combatiente de Infantería en la conocida brigada Golani.
Abogado de profesión, es diplomado en Psicología, Filosofía y Derecho por la Universidad Hebrea de Jerusalén y ha ejercido la abogacía, aunque se ha dedicado a la política desde su juventud.
Desde 1973 es miembro del Parlamento israelí, acta que ha ido renovando en las diferentes elecciones legislativas. Ha representado al partido Likud en los comités parlamentarios de Asuntos Exteriores, Defensa, Finanzas, Interior y Medioambiente.
Entre 1988 y 1992 ha ejercido diferentes cargos en el gobierno del entonces primer ministro del Likud, Isaac Shamir, entre ellos la cartera de Minorías (1988-1990) y, de 1990 a 1992, la de Salud.
En noviembre de 1993 fue elegido alcalde de Jerusalén, cargo del que dimitió en 2003 cuando Sharon lo nombró ministro de Industria y Comercio y viceprimer ministro.
Paso a Finanzas
El 7 de agosto de 2005 pasó a ocupar la cartera de Finanzas en sustitución de Benjamín Netanyahu, quien dimitió de su cargo en desacuerdo con el "Plan de Desconexión" de Sharon para evacuar las colonias judías de Gaza y del norte de Cisjordania.
Olmert, quien probablemente nunca pensó que su acceso al poder le fuera a resultar tan fácil, ha dado a conocer durante la campaña sus intenciones de poner en marcha la denominada "iniciativa de concentración", para evacuar gran parte del territorio ocupado en Cisjordania. Sin dar detalles, este político de fluida retórica, aseguró que las fronteras definitivas de Israel quedarán fijadas para el 2010.
Pese a que la carrera de Olmert hacia la Jefatura de gobierno ha transcurrido con bastante facilidad, en parte porque el Plan de Desconexión iniciado por Sharon tiene un apoyo popular mayoritario, sus adversarios han tratado de ponerle trabas atacándolo en lo personal.
Así en las últimas semanas se ha aireado un supuesto caso de corrupción, que resultó infundado, y hasta que alguno de sus hijos no vive en Israel ni ha hecho el servicio militar. Olmert es el único en su casa que debería haber votado por Kadima, ya que, según la prensa popular, su mujer y sus cuatro hijos son de izquierdas.