Rice anuncia una «reducción significante» de tropas de EEUU en Irak a lo largo de 2006
El Gobierno estadounidense pedirá explicaciones a Rusia por el informe del Pentágono que revela que sus servicios secretos alertaron a Sadam
Actualizado:La secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice, ha considerado probable que durante este año pueda reducirse de forma significativa la presencia militar estadounidense en Irak. "Creo que es completamente probable que veamos una reducción significante" del número de efectivos que cumplen su misión en territorio iraquí, ha dicho la jefa de la diplomacia de EEUU en declaraciones a la cadena de televisión NBC.
Rice ha precisado, no obstante, que cualquier cambio dependerá de las condiciones sobre el terreno y de las recomendaciones de los máximos responsables militares en Irak. El jefe de la Fuerza Multinacional en el país árabe, el general George Casey, ha admitido asimismo la posibilidad de que pueda reducirse el nivel de tropas durante el año, según Rice, quien ha precisado que lo afirma porque las fuerzas de seguridad iraquíes están controlando cada vez más territorio.
El mensaje de Rice coincide con el lanzado esta semana por el presidente de EEUU, George W. Bush, y el jefe del Pentágono, Donald Rumsfeld, quienes siguen descartando poner fechas a una eventual retirada de Irak. Ambos han admitido, sin embargo, que es posible que haya que esperar varios años para ver una retirada total. De hecho, Bush ha afirmado que será una decisión que seguramente tendrá que tomar su sucesor en la Casa Blanca. Unos 133.000 militares estadounidenses están desplegados en la actualidad en Irak.
EEUU pedirá a Rusia que aclare su colaboración con Sadam
Por otra parte, el Gobierno estadounidense pedirá explicaciones a Rusia sobre el informe difundido por el Pentágono que señala que Moscú pasó información al régimen de Sadam Husein sobre los movimientos de EEUU poco antes de la invasión de Irak. "Tenemos que ver todos los documentos y verlos muy cuidadosamente" porque se trata de un asunto "serio" que "plantearemos al Gobierno ruso", anunciaba la secretaria de Estado, Condoleezza Rice. Pese a que el servicio de inteligencia ruso desmintió inmediatamente la información difundida por el Pentágono, la jefa de la diplomacia estadounidense precisó que EEUU tiene la firme intención de aclarar lo ocurrido. "No tengo ninguna razón para cuestionar o confirmar el informe en este momento", aseguró Rice en declaraciones a la cadena de televisión NBC.
Lo que sí dejó muy claro es que "nos tomamos muy en serio cualquier indicio de que un Gobierno extranjero pueda haber filtrado información a los iraquíes antes de la invasión estadounidense, que pudiese haber puesto en peligro a nuestras tropas". Rice no ha querido pronunciarse sobre la reacción de Washington en caso de que se confirme el contenido de ese informe y ha reiterado que primero hay que verlo con detenimiento y preguntarle al Gobierno ruso. Es algo importante que las autoridades de Moscú "deberían tomarse muy en serio también".
Según el informe difundido por el Pentágono el viernes, los servicios de inteligencia rusos transmitieron información a Irak sobre las tropas estadounidenses, a través del embajador de su país en Bagdad. Le informaron concretamente de que las fuerzas estadounidenses se estaban moviendo para interceptar el acceso a Bagdad por el sur, norte y el este, que los bombardeos de EEUU se iban a concentrar sobre la capital iraquí y que el asalto a la ciudad no iba a comenzar antes del 15 de abril de 2003.