Investigan malos tratos a menores de una ludoteca de Barcelona
Actualizado: GuardarAgentes del Cuerpo Nacional de Policía y el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de la localidad barcelonesa de Vilanova i la Geltrú detuvieron ayer a Sandra O. M., de 24 años, propietaria de una ludoteca, como presunta autora de vejaciones y malos tratos contra varios niños de su local que en realidad funcionaba como una guardería. El juez le tomó declaración y le ha dejado en libertad con cargos.
La Policía se hizo cargo del caso tras la denuncia de una ex trabajadora que, según explicó a los investigadores, había grabado con una minicámara algunos comportamientos violentos de la propietaria del local, como, por ejemplo, cuando gritaba y agredía físicamente a los niños. Según la denunciante, también les hacía tragar sus propios vómitos a los niños, no les curaba las hemorragias cuando resultaban heridos, ni les limpiaba sus necesidades y solía encerrar a los menores en un lavabo sin luz.
Ex trabajadora
Fuentes de la investigación señalaron que Sandra O. M. y la ex trabajadora se habían cruzado anteriormente varias denuncias sobre supuestos malos tratos a los niños. La antigua trabajadora de la ludoteca aportó unas imágenes grabadas con una cámara, que ahora serán analizadas por el juez.
La ludoteca donde presuntamente se llevaron a cabo los malos tratos infantiles se llama El Món dels Barrufets. El local atiende entre 15 y 20 niños cada día y funciona como sustituto de las guarderías. Tras la denuncia, algunos padres se dirigieron al local para pedir explicaciones a su propietaria, pero no pudieron hablar con ella.
Gritos
Varias vecinas y madres de niños coincidieron en señalar que la joven gritaba a menudo a los pequeños y ponía siempre la música muy alta en el local para impedir que se oyera el llanto de los niños. Una de las madres, Flor Galán, ha asegurado, en declaraciones a los periodistas, que ha podido ver las imágenes en las que presumiblemente se muestra el trato vejatorio que Sandra daba a los menores, como hacerles comer sus propios vómitos, levantarlos cogiéndolos por las orejas, encerrarlos en el lavabo o darles de comer alimentos caducados.