Famosos seducidos por las motos

Los motores rugientes y el olor a neumático quemado han seducido a muchos. La soledad de cabalgar sobre los émulos modernos de los antiguos caballos que compartían alegrías y fatigas con sus jinetes a través de miles de kilómetros es la debilidad de otros muchos. La mayoría de los grandes aficionados a las motos son personas anónimas, desconocidas en el ámbito del gran público.

Otros, sin embargo, son personas relevantes, personalidades de la vida pública, famosos, gente conocida que se ha dejado encandilar por las bondades de las dos ruedas. El presentador Juan Imedio, adorado por pequeños, mayores y medianos, es uno de los máximos exponentes de los amantes de las dos ruedas. «Las motos me gustan desde toda la vida. Es junto a la música, la lectura y los caballos de mis aficiones predilectas. Me gusta disfrutarla de forma solitaria. Aunque lleve a alguien detrás, prefiero estar incomunicado, sentir a la moto como una prolongación de mi cuerpo. En esos momentos la moto me da todo lo que necesito», confiesa Juan Imedio.

Para muchas de las personas acostumbradas a estar a luz de los focos de la popularidad, la sensación de soledad que transmite tirar millas encima de una moto es una experiencia impagable. Un placer que entra en contradicción con las grandes aglomeraciones que provocan las pruebas del Mundial de Motos y las grandes concentraciones que se vivirán en Jerez con la celebración del primer Gran Premio de la temporada. «No suelo ir a esos sitios porque la gente no me deja vivir con sus constantes muestras de cariño. Se agradece, pero no consigo disfrutar como debería», explica Juan Imedio.

Pero no todos huyen de las multitudes. El pasado año, pasaron por el circuito jerezano aficionados a las motos como el televisivo cocinero Arguiñano, la modelo Esther Cañadas o el ex futbolista Kiko. A buen seguro que este año vendrán muchos más famosos. Habrá que estar atentos.