El sistema parasimpático
Actualizado:El sistema simpático y el parasimpático son dos elementos de nuestra estructura nerviosa que se contrarregulan. El sistema nervioso simpático está muy relacionado con el nivel de alerta y con la tensión del cuerpo humano; en cambio el parasimpático influye principalmente en el control automático y vegetativo de otros sistemas u órganos.
Se ha considerado clásicamente que el sistema simpático influye en un mayor nivel de actividad orgánica, mientras que el parasimpático tendría un efecto reductor de esa actividad. Incluso se han llegado a determinar personas con un perfil de comportamiento físico y psíquico más relacionado con uno o con otro.
El reloj interno tiene una gran capacidad de adaptación a diferentes circunstancias, pero no puede ser modificado de forma continua o sin ningún tipo de orden. Cuando no se da esa armonía, el cuerpo detecta una falta de coordinación entre la capacidad del organismo para hacer frente al trabajo y el nivel de esfuerzo y actividad que se pretende desplegar.
Ello ocasiona que el estado de salud se resienta. Aparecen diversas molestias, como un progresivo cansancio y debilidad identificado como agotamiento, que al principio suele alertar a quien lo sufre por ser algo no esperado.
Es frecuente padecer problemas de apetito e incluso gástricos, así como cambios en el ritmo intestinal. La calidad del sueño también se deteriora, ya que aparecen problemas relacionados con el insomnio y con un despertar prematuro, lo que perjudica la capacidad de descanso.