Lukashenko, reelegido en Bielorrusia con el 82,6% de los votos
Las elecciones presidenciales del domingo han sido tachadas de "farsa electoral" por la oposición bielorrusa, que pide anular los comicios
Actualizado: GuardarEl presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, ha sido reelegido con el 82,6% de los votos, según ha anunciado hoy Lidia Yermóshina, presidenta de la Comisión Electoral Central (CEC) del país.
En rueda de prensa, Yermoshina ha indicado que estos resultados oficiales no definitivos corresponden al 100% de los sufragios emitidos en las elecciones presidenciales del domingo, que ha sido tachadas de "farsa electoral", por la oposición bielorrusa. También los observadores internacionales presentes en el proceso electoral dudan de la limpieza de los comicios ya que han sido numerosas las irregularidades que han podido presenciar.
Según los datos ofrecidos por la CEC, el líder de la oposición democrática, Alexandr Milinkiévich, obtuvo el 6% de los votos, mientras que los dos otros candidatos, Serguéi Gaidukévich y Alexandr Kozulin, consiguieron el 3,5 y 3,2% de los sufragios, respectivamente.
La participación electoral, también de acuerdo con los datos oficiales, fue del 92,6% del censo.
"Los hombres deben saber perder con dignidad", ha dicho Yermóshina al descalificar las denuncias de los opositores de que los comicios fueron un fraude.
La oposición ha convocado a nuevo mitin de protesta en el centro de la capital bielorrusa para las 18.30 hora local (16.30 GMT) para demandar las anulación de los comicios. "Procuraremos por todos los medios, inclusive a través de las estructuras internacionales, que estas elecciones sean declaradas no válidas", dijo anoche Milinkiévic ante miles de sus partidarios en la plaza de Octubre de la capital.
Milinkiévich dijo que, según datos de su equipo, Lukashenko en realidad obtuvo sólo un 45% de los votos emitidos, y que en la capital apenas consiguió un 30%, lo que haría necesaria una segunda vuelta entre ambos. Se congratuló de que "las autoridades no consiguieron intimidar a los bielorrusos, que superaron su miedo".
El líder de la oposición se refería a las amenazas de Lukashenko, en el poder desde 1994, de declarar "terroristas" a quienes salgan a la calle para rechazar el resultado electoral y de reprimir con dureza posibles desórdenes.
"Ha habido falsificaciones masivas, pero la libertad nos espera a la vuelta de la esquina", prometió el político, con la cabeza descubierta pese a una fuerte ventisca y la nevada que se precipitó sobre la capital al caer la noche.
Petición de una segunda vuelta
Las cifras del escrutinio electoral fueron recibidas con silbidos y gritos de "Gañbá" (Vergüenza) y "Zhivie Belarus" (Viva Bielorrusia) por los miles de partidarios de la oposición que acudieron tras el cierre de los colegios a la plaza de Octubre de Minsk, situada entre la Comisión Electoral y la sede de la Presidencia.
"Ahora conocemos los resultados de los comicios: Lukashenko no ganó en la primera vuelta, y esto demuestra que el pueblo es capaz de luchar por la verdad y quiere un lugar en el mundo civilizado", indicó.
Según el dirigente opositor, en Bielorrusia "debe haber una segunda vuelta electoral, y tiene que ser distinta a la primera", sin que el poder monopolice los medios de comunicación, los sondeos, la supervisión y el recuento de los votos sin el menor control de la sociedad.
"`Creemos, Podemos, Venceremos! `Viva Bielorrusia!", coreó junto a la multitud Milinkiévich, con un ramo de claveles de distintos colores en una mano y la otra levantada con el signo de la victoria.