El parque del Barrero no abrirá sus puertas al público al menos hasta final de año

El parque del Barrero se está convirtiendo en uno de los grandes mitos entre los proyectos urbanísticos inconclusos con los que cuenta la ciudad. Los vecinos que viven cerca del que se ha calificado repetidamente por los dirigentes políticos isleños como el «futuro pulmón» del centro de la localidad esperan impacientes desde hace casi una década a que las instalaciones abran sus puertas para disfrutar de las prometidas zonas verdes, que a día de hoy sigue siendo un espacio dominado por la suciedad y la vegetación salvaje.

Las últimas informaciones indican que el parque podría ser inaugurado finalmente en noviembre o diciembre del presente año, aunque es más que probable que su apertura se retrase hasta los primeros meses de 2007. Actualmente, la Gerencia de Urbanismo mantiene abierto el plazo de presentación de ofertas para la ejecución de la segunda fase del proyecto. Un plazo que se cerrará el 27 de marzo y cuyas plicas se abrirán el 6 de abril.

De este modo, los responsables de la Gerencia esperan que mayo sea el mes en el que las máquinas vuelvan a entrar en el parque para realizar los trabajos complementarios que han causado gran parte del retraso. Un nuevo problema estribará en que muchos de los equipamientos del parque que debían haber comenzado a usarse hace ya tres años están ya bastante deteriorados, lo que puede provocar nuevas demoras. En todo caso, desde Urbanismo son optimistas y esperan que las nuevas obras estén completadas antes de que acabe 2006 y que el parque del Barrero pueda ser abierto al público entre el final del presente año y el comienzo del siguiente.

Historia de un retraso

La Junta de Andalucía y el Ayuntamiento firmaron un convenio marco en 1999 en el que se comprometían a regenerar la zona del Barrero, situado entre El Almendral y el Observatorio de Marina, para convertirla en una de las grandes zonas verdes de la ciudad. Según las primeras estimaciones, el parque debería haber abierto al público en el mes de noviembre de 2003. Sin embargo, una vez finalizadas las obras, la Gerencia detectó una serie de deficiencias que impedían abrir las instalaciones. Así, tras una larga negociación con la consejería de Obras Públicas se llegó a un nuevo acuerdo en diciembre de 2004 por el que se incrementaba el presupuesto de ejecución del parque para corregir las imperfecciones.

Los trabajos, que cuentan con una inversión de 492.536 euros, que se llevarán a cabo en esta segunda fase consistirán fundamentalmente en el cerramiento perimetral de todo el parque del Barrero, una mejora general de las zonas verdes con nuevas plantaciones y más zonas de césped, la sustitución de un camino de grava por otro de adoquines.

Además, se dotará al parque de juegos infantiles y se introducirá un elemento tubular que recordará el meridiano de San Fernando. Éste tendrá un trazado sinuoso que irá colocado por el pavimento de uno de los extremos del interior del parque. Este elemento, que simulará el meridiano cero, consistirá en un tubo de acero galvanizado de 220 milímetros de diámetro que podrá ser iluminado. Obras que permitirán inaugurar un parque con cuatro años de retraso y que ya ha costado más de dos millones de euros.