Fallece el presidente y fundador del Grupo Pascual
Actualizado:El mundo económico y empresarial lloró ayer la perdida de Tomás Pascual Sanz, para muchos el «vendedor» español más emblemático y fallecido ayer en Madrid a los 79 años. Castellano antiguo en sus costumbres, le gustaba más que le consideraran un hombre de ventas que un fabricante, pues para ello lideraba la red comercial más importante del país en el sector alimentario, que ahora pasará a ser dirigida por su primogénito.
En realidad, a Tomás Pascual no le gustaban los calificativos, ni siquiera cuando fueran elogiosos. Prefería ser valorado por el trabajo diario, que el comenzó a los doce años. Seis años después, con la mayoría de edad, se fue a recorrer los pueblos de la zona -ya fuera en bicicleta o en moto- para conocer sus inquietudes comerciales. Sería su primera cartera de clientes.
El embrión
En la década de los cuarenta amplió esa cantina para abrir un negocio de ultramarinos, en el que repartía los pedidos con un camión alquilado. En 1950 constituyó su primera sociedad formal, y en 1966 creó la sociedad Pascual de Aranda S. A., embrión del grupo alimentario actual que inició tres años más tarde con la compra de una envasadora de leche. De hecho, su gran producto estrella, después copiado por sus competidores, fue el lanzamiento nacional de los envases de tetrabrik.
Tomás Pascual, víctima de una embolia pulmonar, deja atrás a una gran familia, pero también a más de 4.500 empleados. El Grupo Pascual, referente en el sector alimentario con una gama de más de 400 productos, facturó en 2005 unos 1.000 millones de euros.