Autoridad moral
Actualizado: GuardarSe habla y no se para en los mentideros futbolísticos gaditanos de las palabras de Armando el pasado miércoles después del entrenamiento. Sus declaraciones no han dejado a nadie impasible. Algunos se han llevado las manos a la cabeza como si hubiese pronunciado algo así como una blasfemia. Otros están completamente de acuerdo y le reconocen su valor por decir lo que muchos piensan. Ahora iremos desmenuzando sus palabras, pero antes habría que admitir que si alguien tiene derecho en la actual plantilla del Cádiz para decir que la afición y los medios de comunicación son injustos o se pueden equivocar en sus apreciaciones, ese es Armando.
Si es cierto lo que se dice de que la afición es soberana y puede opinar lo que quiera, Armando y otros veteranos de este equipo también tienen, o deberían tener, cierta soberanía para que su opinión sea escuchada, respetada y analizada de acuerdo a su peso específico en el club. Es lo que se llama autoridad moral. Algo que hay que ganarse con años de buen servicio y que, en mi opinión al menos, Armando merece.
Ocho temporadas en el equipo con un rendimiento sobresaliente. Protagonista evidente de los dos ascensos. Negociador implicado e implacable en la época lamentable en que el Cádiz se moría. Ídolo de la afición que ya le ve como un gaditano más. Con todos los respetos, no es lo mismo que estas palabras las pronuncie Lobos, Morán o Medina o cualquier otro semi-recién llegado a que las diga Armando.
Pero es que voy más allá. Si hubiese dicho alguna mentira merecería respeto, pero es que no ha dicho ninguna burrada. Sólo ha expuesto su verdad que también es la de otros muchos como yo. Dijo Armando que no se está valorando en Cádiz en su justa medida la temporada del equipo. Estoy de acuerdo. Aseguraba también que hay un sector de la afición que está faltándole al respeto a jugadores emblemáticos como Suárez, Fleurquin, Varela, Pavoni o Sesma como si fuesen juguetes viejos y rotos con el deseo de ver en acción caras nuevas con todo por demostrar como Lobos o Vella. Estoy de acuerdo. Lo único en lo que puedo ponerle un pero es cuando dice que se va a partir la cara para seguir en Primera sólo por los siete u ocho mil de la época de Segunda B que son los que se quedaron hasta el final del partido contra el Sevilla a pesar del 0-4. Aun así, en conjunto comparto el 95% de lo dicho por Armando. Y estoy seguro que muchos de ustedes también.