López Caro se declara «culpable» del desastre copero en Zaragoza

Juan Ramón López Caro se declaró ayer «el máximo culpable» del desastre del Real Madrid en La Romareda y eximió de responsabilidad a los jugadores, ya que, en su opinión, «demostraron su mejor actitud». Aunque no pudo ocultar su insatisfacción con el juego del equipo, el técnico madridista solicitó que las críticas apunten hacia él y no a los futbolistas, en quienes mantiene su plena confianza y a los que arengó durante una reunión de veinte minutos.

López Caro asumió el debe de la histórica goleada sufrida ante el Zaragoza y dijo no estar arrepentido por prescindir de Cicinho y Zidane en el once. «El equipo que salió tiene todo mi respeto. Son grandes jugadores, aunque no se adaptaron a las circunstancias frente a un equipo cuyos destellos puntuales fueron un mazazo continuo», destacó en una entrevista a Onda Madrid.

A pesar de que el 6-1 dejó en evidencia a futbolistas que se complicaron más su continuidad en el club, casos de Roberto Carlos, Helguera, Míchel Salgado y Ronaldo, López Caro insistió en apoyar a su plantilla y defendió especialmente al delantero brasileño, que acaba de superar una nueva lesión muscular y se estrenaba esta temporada en la Copa.

Respecto a su futuro, ahora que su cargo vuelve a estar en entredicho y ha recuperado su condición de entrenador provisional, aseguró no estar preocupado por la decisión que adopte Florentino, aunque advirtió que le gustaría «que se valorase encarecidamente el trabajo profesional».

Tras una reunión a puerta cerrada de cuerpo técnico y jugadores en el vestuario de Valdebebas, donde se hizo autocrítica y todos se juramentaron para superar el trance, el Madrid regresó a los entrenamientos con la duda de Iván Helguera para el comprometido partido de Liga de mañana en Bilbao, ya que sufre una cervicalgia aguda y tuvo que abandonar el estadio aragonés con un collarín.

Si se confirma la ausencia de Helguera, López Caro recurrirá a Woodgate como socio de Sergio Ramos en el centro de la defensa.