La Policía descubre en La Isla a un narco fugado de Francia, que permanecía escondido

La Policía ha detenido en la localidad gaditana de San Fernando a uno de los mayores traficantes de hachís que operaba en Francia y que era reclamado por ese país, según informó ayer la Dirección General de la Policía.

Con esta detención, se cierra una amplia operación de colaboración hispano-francesa, que ha concluido con la desarticulación de una organización criminal que se dedicaba al tráfico ilícito de vehículos y de sustancias derivadas de cannabis, principalmente hachís.

El detenido, Nabil M. A., natural de Ceuta, de 21 años, ha sido puesto a disposición de la Audiencia Nacional tras ser arrestado el pasado jueves. Según confirmaron fuentes consultadas por este periódico, Nabil M. A. estaba ingresado en el Centro de Recuperación de Minusválidos Físicos (CRMF), donde se recuperaba de una paraplejia. El joven iba en silla de ruedas tras sufrir un accidente de tráfico. Esta circunstancia pudo ayudarle a mantenerse lejos del cerco policial que existía en torno a él.

Sin que el presunto narco lo supiera, estaba siendo vigilado desde hacía días por agentes camuflados, que se cercioraron de que el minusválido era la persona buscada.

Las autoridades judiciales francesas le acusan de narcotráfico, de importación ilícita de estupefacientes en banda organizada; transporte, tenencia, ofertas, cesiones y consumos ilícitos de drogas; importación sin declaración previa de mercancías prohibidas, tenencia y transportes violando las disposiciones legales o reglamentarias de mercancías prohibidas; robos en banda organizada y receptaciones de artículos procedentes de robo; y uso de placas de matricula falsas.

Las actividades delictivas imputadas fueron cometidas durante el año 2002 y hasta el mes de enero de 2005, en las localidades francesas de Burdeos y Lille.

Muy cualificados

La banda a la que pertenecía el joven era altamente cualificada. Las pesquisas apuntaban a que importaban grandes cantidades de cannabis desde Marruecos a las regiones de Burdeos, norte de Francia y Bélgica.

La droga era transportada por barco al continente y luego cargada en España en vehículos potentes, escoltados por otros vehículos (lanzaderas), hasta el lugar de entrega de la mercancía.

Los principales responsables de esta organización criminal fueron detenidos, excepto tres de ellos, incluido el ahora detenido, cuyas búsquedas resultaron infructuosas.

Los datos resultantes de las investigaciones señalaban que las personas objeto de investigación, entre ellos el ciudadano ceutí, habían participado activamente en la importación a Europa de varios cientos de kilos de cannabis. En la operación han intervenido agentes de la Jefatura Superior de Ceuta, de la Comisaría de San Fernando y del Grupo de Localización de Fugitivos de la Policía Judicial.