Los cofrades apuestan por una calle Nueva sin alcorques y con farolas y macetones movibles
El Consejo Local de Hermandades pide que se supriman los elementos de luz en Semana Santa y no sólo en el Corpus si el Ayuntamiento no consigue la eliminación de la marquesina de la vía El presidente Rafael Corbacho trasladará hoy la decisión aprobada en el pleno al concejal de Cultura
Actualizado:«Las guerras se ganan batalla a batalla». Ése era el sentir ayer de muchos cofrades tras aprobar que la calle Nueva pierda la fisonomía original que el Ayuntamiento propone de alcorques y farolas fijas. Una gran victoria que las hermandades han conseguido tras arrancar del Consistorio tres proyectos alternativos, que votaron ayer en el Pleno del Consejo Local de Hermandades a mano alzada.
Uno a uno se fueron desgranando los proyectos con sugerencias muy distintas. La primera proponía quitar los alcorques para poner macetones, pero con farolas fijas. La segunda daba un paso más. Quitaba los alcorques y ponía farolas y macetones desmontables, que en Semana Santa y en el Corpus serían trasladados a una de las paredes; y por último, la tercera, sugería lo mismo pero con una salvedad: añadir un palco para glorificar los pasos.
Votación. Gana la segunda con 22 manos alzadas y dos abstenciones; la primera se pasa de largo y la tercera sólo recibe dos votos. Un resultado que hoy trasladará el presidente de las cofradías gaditanas, Rafael Corbacho, al concejal de Cultura para concretar una reunión y trasladar el sentir de los cofrades, ya que «en algo debemos ceder», apunta el presidente.
Miedos y ruegos
El miedo es dejar las farolas en Semana Santa y desmontarlas en el Corpus, como propuso la alcaldesa el pasado miércoles en la reunión mantenida con la comisión permanente. De ahí que si se ven que estorban este año se quitarán para el siguiente. Sin embargo, la cosa no estaba muy clara, lo que sulfuró a más de un cofrade que no entendía la propuesta. Entonces, Rafael Corbacho les recordó que se habían logrado solucionar «dos de los problemas que más nos preocupaban: los árboles y la marquesina».
Por eso, al proyecto del Consistorio le pusieron una salvedad. «Se quitan las farolas si la marquesina está el 9 de abril». Ésta fue la segunda victoria. Los cofrades habían conseguido el miércoles el compromiso de la alcaldesa de quitar la marquesina si no la puede eliminar el dueño, siempre que el acuerdo sea amistoso, ya que si no habrá que ir a juicio, siendo imposible una solución para el comienzo de la Semana Santa. El gran miedo de los reunidos.
Salió, además, a relucir el problema con la Custodia el día del Corpus, ya que «no va a ir por el centro implicando que vaya dando botes». Todo quedó en agua de borrajas para que al final todos los cofrades recordasen el compromiso del Ayuntamiento de aportar una subvención de 15 millones de euros y el compromiso de contar con ellos para futuras remodelaciones.