Suerte de nevada

El dicho se hizo realidad. La sabiduría popular había presagiado que la nevada caída el domingo y el lunes en Grazalema representaría el comienzo de un año fructífero, y el jueves la diosa fortuna tradujo aquel augurio en millones de euros.

Ángel Luis Gutiérrez Nieto, gerente de la única administración de juegos de Grazalema, una oficina receptora mixta, en la que se combina la actividad de lotería con la venta de ropa y regalos, ha traído la suerte. «Esta mañana nos hemos levantado con la sorpresa de que hemos dado un premio millonario», expresa eufórico. Son 2.764.421,76 euros (unos 460 millones de pesetas), una cifra que ha hecho que algún agraciado haya logrado unir a la salud y el amor la tercera pata de la mesa de la felicidad.

«En el pueblo nadie sabe a quién le ha tocado el gordo», dice una empleada de la oficina a un vecino curioso dispuesto a que a él también le toque un pellizco con una nueva apuesta.

El administrador de loterías se apresura a añadir que además del gordo también ha dado un segundo premio, aunque de menor cuantía, de 2.044,69 euros, con cinco aciertos.

Todo el mundo dice que la nieve ha traído la suerte, y Ángel Luis Gutiérrez cree que esta hipótesis puede ser cierta literalmente. «El gordo no sabemos si le ha tocado a gente de Grazalema o de fuera, a gente que ha venido a ver la nieve estos días». El jueves, día en que se selló el boleto con los números 2, 8, 12, 13, 18 y 31, había ya poca nieve en los alrededores, pero todavía venían muchos visitantes atraídos por el halo de la estampa de la sierra nevada.

El gerente de esta oficina de recepción de apuestas parece tocado por la suerte. «En el hueco de un año y medio hemos dado cinco grandes premios, en primitiva y bonoloto», se congratula. Según sus datos, su oficina tiene «el porcentaje más alto en reparto de premios de toda la provincia». Asegura que «hasta ahora lo teníamos en la bonoloto, y ahora, con este premio, también estaremos en cabeza en la primitiva, en función del número proporcional de las apuestas que se hacen en cada administración». Si la suerte de este jueves la une el vecindario a la nieve, Ángel Luis Gutiérrez hace extensiva la fortuna a un sector en auge, el turístico. Los grandes premios que ha dado esta oficina en el último año y medio han ido a parar a personas relacionadas con el gremio de la hostelería.

«El primer premio que dimos fue para Antonio Acevedo, del restaurante Cádiz el Chico, con 115 millones pesetas; otro de un millón de euros fue compartido por Francisco Naranjo, dueño de un pub, y José Mari, del bar La Posadilla; el del bar la Tertulia se llevó 60 millones de pesetas; el segundo premio del jueves fue para el del bar Zulema», detalla.