Listas de espera
Actualizado: GuardarEl pasado 23 de enero se publicó en este periódico que el nuevo equipo de cirugía del Hospital de Puerto Real «ha intervenido desde el 28 de noviembre al 1 de enero a 219 pacientes. De ellos, 210 habían superado el máximo de 180 días en lista de espera establecido por la Consejería de Salud y continuaban sin ser operados porque habían rechazado la opción del SAS de ser atendidos en otros hospitales de la zona». Me gustaría dejar claro que esto no es cierto.
Les cuento brevemente mi caso. Tras sufrir una fractura el pasado mes de enero de 2005 y llevarme escayolado tres largos meses, el 27 de abril me dice el especialista que lo mío es de quirófano. Dado el tiempo que llevaba perdido, el médico considera conveniente operar lo antes posible y entro en lista de espera con prioridad Muy preferente. Para mi frustración, veo cómo van pasando los meses y finalmente me citan para operarme el 13 de diciembre (229 días después y habiendo pasado más de 180 días desde las pruebas de anestesia). En ningún momento nadie del Hospital, la Conserjería o similar se puso en contacto conmigo para ofrecerme alternativa alguna, es mós, yo, como tantos otros pacientes, ni siquiera sabía que esa opción existía. La tarde que me hospitalizan, en mi planta ingresamos unos 8 pacientes al mismo tiempo y entenderán que el personal que trabaja en la tan criticada a veces sanidad pública se viera desbordado esos días, para que el gerente del Hospital pueda presumir de haber cumplido sus objetivos (además de, probablemente, embolsarse un dinero curioso) y el político de turno se apunte el tanto de decir que se reducen las listas de espera. Lo peor de todo esto es que, encima, se ocultan los derechos de los pacientes y se miente de forma consciente y alevosa utilizando incluso a los profesionales como causantes del desastre organizativo. Les pediría por favor que antes de publicar algo así lo contrastasen adecuadamente, porque los medios de comunicación deberían ser los que desenmascarasen la farsa que estos personajes, que pagamos con nuestros impuestos, se montan con el único objetivo de mantenerse en el cargo.
Miguel Ángel Calvo Pérez. Cádiz