«Me parece bien que lo abaraten porque era caro»

Ana Alvarado Castro lleva casi 30 años fumando tabaco negro. «Al principio lo pedía, luego me compraba un cigarro suelto y después un paquete aunque era caro» comenta. Ana asegura que se llevó una sorpresa cuando ayer por la mañana le cobraron por su paquete de tabaco 2 euros, ya que, hasta ahora el precio era de 2,50 euros, «así que me ha parecido estupendo que bajen los precios porque mi economía se resiente y yo fumo un paquete diario».

Ana asegura que nunca se ha planteado dejarlo «aunque ahora estemos con toda la polémica de esta ley y tanta gente que sí lo esté haciendo porque yo disfruto fumando aunque reconozco que algunas veces me siento ridícula porque fumo muchísimo y mis hijos lo hacen y hasta me regañan».

En cuanto al tema de la venta de tabaco en los quioscos, esta fumadora dice verlo «como una cuestión administrativa» aunque prefiere comprarlo en el estanco «porque siempre algo te ahorras pero es verdad que los fines de semana te quedas sin tabaco y ya no tienes esa facilidad». Con respecto a la división de los locales de fumadores y no fumadores aclara que «yo respeto que haya personas que no tienen porqué respirar el humo de mi tabaco y por eso nunca fumo ni lo intento en espacios sin humo pero también pido que me respeten a mí y que sean tolerantes cuando yo me fumo un cigarro en una cafetería», concluye. FUMADOR